Por Agroempresario.com
En un encuentro clave con la Mesa de Enlace, el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, reafirmó su firme respaldo a los productores agropecuarios en el reclamo contra las retenciones a las exportaciones. La reunión se dio en un contexto de ajustes fiscales anunciados por el gobierno nacional, que mantiene la rebaja temporal para trigo y cebada, pero eleva las alícuotas para soja, maíz, girasol y sorgo, generando preocupación en el sector.
Frigerio sostuvo con énfasis que “Entre Ríos es el campo”, y que su gobierno está “siempre al lado de los productores” con acciones concretas, como la reducción de la presión impositiva y el acompañamiento permanente para que Nación avance en la baja progresiva y definitiva de las retenciones. “El diálogo con el campo es permanente desde el primer día de nuestra gestión, después de décadas de gobiernos que le dieron la espalda”, expresó el mandatario durante el encuentro celebrado en el Centro de Convenciones de Paraná.
La Mesa de Enlace, integrada por las principales entidades del agro argentino, participó de este encuentro con el objetivo de fortalecer el diálogo con las autoridades provinciales. Guillermo Bernaudo, ministro de Desarrollo Económico de Entre Ríos, explicó que en la reunión se abordaron temas centrales como la situación general del sector agropecuario, la carga fiscal y el impacto de los derechos de exportación.
“También hablamos del estado de los caminos rurales y del esfuerzo sostenido que está haciendo el gobierno provincial para mejorar la infraestructura”, señaló Bernaudo, destacando que la mejora de la red vial es fundamental para la competitividad de la producción agropecuaria.
Por su parte, Carlos Castagnani, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), remarcó que la intención de la Mesa de Enlace es recorrer el país y mantener un diálogo directo con los gobernadores. “Queremos conocer las problemáticas provinciales que son transversales y afectan a todas las economías regionales. Además, buscamos tratar los temas nacionales que impactan en el agro y en las economías provinciales”, afirmó Castagnani.
Junto a Castagnani estuvieron presentes sus pares Nicolás Pino (Sociedad Rural Argentina), Lucas Magnano (Coninagro) y Andrea Sarnari (Federación Agraria Argentina), quienes expresaron su respaldo al reclamo por la eliminación de los derechos de exportación.
En un comunicado oficial, la Mesa de Enlace destacó que esta reunión “forma parte de una serie de encuentros con mandatarios provinciales, con el fin de dialogar sobre la situación del sector agropecuario, haciendo especial hincapié en la necesidad de eliminar los Derechos de Exportación (retenciones), un reclamo histórico del campo argentino”.
La entidad alertó sobre el impacto negativo que estas cargas fiscales tienen en la rentabilidad de los productores, especialmente en un contexto de altos costos de producción, caída de precios internacionales y escasa previsibilidad económica. También se discutieron temas clave como los caminos rurales, la infraestructura y las realidades específicas de las distintas producciones agropecuarias en el país.
El gobernador Frigerio remarcó que su administración viene trabajando desde el primer día para brindar un marco de apoyo concreto al campo entrerriano. “Estamos comprometidos con medidas que alivien la presión impositiva y que generen condiciones para que la producción crezca y se desarrolle de manera sustentable”, indicó.
La gestión provincial, según Bernaudo, se enfoca en mejorar la infraestructura vial para facilitar la salida de la producción y en generar políticas públicas que acompañen a los productores en sus demandas.
En paralelo a este encuentro, la Asociación de la Cadena de la Soja (Acsoja) manifestó su rechazo al fin de la rebaja temporal de las retenciones para este cultivo. En un comunicado, la entidad calificó este impuesto como “arbitrario, injusto y discriminatorio respecto a otros cultivos”.
Acsoja alertó que “la producción de soja está muy por debajo de su potencial debido a la incapacidad de sucesivos gobiernos para encontrar una solución inteligente”. Además, señaló que la alta presión fiscal desincentiva el uso de tecnologías modernas y limita la competitividad del sector en el mercado global de alimentos.
La entidad anticipó que los datos preliminares de la campaña muestran un impacto negativo significativo en la siembra de soja, afectando vastas regiones del país y generando un quebranto en la rentabilidad de los productores.