Soja: ROSARIO
$389.000 5.14%
Maíz: ROSARIO
$241.200 0.00%
Trigo: ROSARIO
$273.800 3.79%
Por Agroempresario.com
A tan solo 100 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en el partido de Zárate, se esconde un destino que muchos aún no descubrieron: Lima. Este pequeño pueblo bonaerense, rodeado de naturaleza, playas sobre el río Paraná y una excelente propuesta gastronómica, se consolida como una alternativa ideal para una escapada corta, especialmente durante fines de semana largos o feriados.
Lejos de las multitudes que suelen concentrarse en los principales centros turísticos, Lima ofrece un respiro con identidad propia. Su tranquilidad, sumada a sus paisajes ribereños, convierten al lugar en una joya para quienes desean desconectar del ritmo urbano sin recorrer largas distancias. En menos de una hora en auto o mediante una combinación de tren y colectivo, se puede arribar a este rincón encantador del norte bonaerense.
Fundado en 1888, el pueblo creció inicialmente con la llegada del Ferrocarril Mitre y más tarde con la instalación de las Centrales Nucleares Atucha, que siguen funcionando y forman parte del circuito turístico local mediante visitas guiadas. Estos elementos históricos conviven armoniosamente con la naturaleza, convirtiendo a Lima en un destino completo.
El gran atractivo natural del pueblo son sus playas de arena dorada sobre el río Paraná. Allí, tanto familias como grupos de amigos disfrutan de tardes soleadas, mates compartidos y caminatas por la costa. La zona es también ideal para la práctica de deportes náuticos, pesca deportiva y paseos en lancha.
Para quienes prefieren actividades rurales, Lima ofrece senderos rodeados de vegetación autóctona, estancias cercanas que permiten cabalgatas y propuestas para el turismo de campo. Es habitual ver a los visitantes recorrer el pueblo a pie o en bicicleta, apreciando su arquitectura sencilla, la paz de sus calles y la amabilidad de sus habitantes.
La oferta gastronómica es otro de los pilares de Lima. Parrillas familiares y restaurantes tradicionales invitan a disfrutar de asado, empanadas, chorizos y vinos locales en un entorno relajado. La cocina casera, acompañada de la hospitalidad bonaerense, se convierte en una experiencia que combina sabor y calidez. Durante los fines de semana largos, algunos locales organizan eventos con música en vivo, ferias de productos regionales y comidas típicas.
En el plano cultural, Lima destaca por su plaza Mitre, corazón social del pueblo, y por la Parroquia San Isidro Labrador, un templo de estilo neocolonial que refleja la herencia histórica de la región. Además, cada 28 de septiembre, el pueblo celebra su aniversario con actividades festivas que atraen a vecinos y turistas.
Llegar a Lima es sencillo. En auto, se toma la Autopista Panamericana (Ruta Nacional 9) hasta el kilómetro 100, donde se accede al pueblo por caminos pavimentados. También se puede ir en tren tomando el ramal Mitre desde Retiro o Villa Ballester hacia Zárate, combinando con colectivos locales hasta el centro de Lima.
En tiempos donde el turismo de cercanía cobra valor, Lima se presenta como un refugio ideal para disfrutar de lo simple: río, verde, historia y buena comida, todo a un paso de la capital.
