Por Agroempresario.com
San Javier y Yacanto, ubicado en el corazón del Valle de Traslasierra, se convirtió en un referente internacional al ser seleccionado para representar a Córdoba en la iniciativa “Best Tourism Villages 2025” de ONU Turismo, que reconoce a los pueblos rurales más destacados del mundo por su sostenibilidad, preservación cultural y desarrollo comunitario.
Ubicado a 202 km de la ciudad de Córdoba y a 20 km de Villa Dolores, este destino serrano invita a recorrer sus calles arboladas y bosques nativos, en un entorno donde el tiempo parece detenerse. Con menos de 3.000 habitantes y un 80% de su territorio cubierto por bosque, San Javier y Yacanto combina ecoturismo, turismo rural y actividades al aire libre con la conservación de su identidad y patrimonio histórico.
Las antiguas casas, iglesias y fachadas preservadas transmiten una atmósfera única que fascina a quienes lo visitan. La comunidad local ha logrado mantener sus tradiciones y su relación con la naturaleza, lo que convierte al pueblo en un destino sostenible y auténtico. Los bosques serranos, los arroyos cristalinos y los pintorescos puentes de madera son protagonistas de la experiencia turística, integrando naturaleza y cultura.
Los visitantes destacan la tranquilidad de las calles repletas de algarrobos, sus atardeceres y la sensación de un lugar detenido en el tiempo. Este equilibrio entre conservación y turismo ha sido clave para el reconocimiento internacional de ONU Turismo, que premia a los pueblos que promueven un desarrollo respetuoso con el entorno y las comunidades locales.
1. Senderismo y contacto con la naturaleza
Las sierras ofrecen múltiples circuitos de trekking y caminatas, adaptados tanto para aventureros como para familias. El Cerro Champaquí, punto más alto del valle, es ideal para quienes buscan desafíos exigentes, mientras que senderos como El Arroyo, Quebrada de Ambrosio y De los Algarrobos permiten disfrutar de ollas naturales, vistas panorámicas, arroyos cristalinos y puentes rústicos.
2. Vinos de altura
El valle cuenta con reconocidas bodegas integradas a los Caminos del Vino de Córdoba, donde se producen etiquetas que reflejan la identidad del terruño. Entre ellas se destacan la Bodega Aráoz de Lamadrid, Bodega Noble de San Javier y La Matilde, ofreciendo experiencias enoturísticas únicas que combinan paisajes, historia y sabores locales.
3. Turismo rural y vida serrana
San Javier y Yacanto conserva estancias, posadas y casonas antiguas que muestran la historia y cultura de la región. Entre los sitios imperdibles se encuentran la Casa Poeta Núñez, el Antiguo Surtidor y la Iglesia San Francisco Javier, que permiten a los visitantes sumergirse en la tradición local y comprender la vida serrana de manera auténtica.
4. Gastronomía sostenible
El pueblo se destaca por su propuesta de gastronomía KM0, que prioriza alimentos producidos, cosechados y elaborados localmente. Restaurantes como Agreste, Alcacha y La Pana ofrecen platos auténticos, elaborados con productos del propio valle, promoviendo un turismo responsable y consciente que respeta el entorno y apoya a los productores locales.
El reconocimiento de ONU Turismo coloca a San Javier y Yacanto entre los mejores pueblos del mundo, destacando la armonía entre desarrollo turístico y sostenibilidad. La comunidad local ha demostrado que es posible mantener la autenticidad y preservar el patrimonio natural y cultural mientras se impulsa un modelo económico que beneficia a los habitantes y visitantes por igual.
San Javier y Yacanto se presenta así como un ejemplo de turismo rural sostenible, donde la naturaleza, la historia, la cultura y la comunidad conviven en equilibrio, invitando a descubrir un rincón de Córdoba único, donde el encanto serrano y la autenticidad local se combinan para ofrecer experiencias memorables.