Por Agroempresario.com
En la localidad de Lules se llevó a cabo una jornada de capacitación destinada a productores apícolas, integrantes de la Cooperativa Apícola Norte Grande y técnicos del INTA Famaillá. La actividad, organizada por la Subdirección de Alimentos de la Secretaría de Producción, tuvo como objetivo central la obtención del carnet de “Manipulador de Alimentos”, requisito obligatorio según el Código Alimentario Argentino (CAA).
El curso, dictado por las técnicas profesionales Patricia Yazbek y Luciana Neme Scheij, se desarrolló bajo la modalidad de jornada completa en las instalaciones de la Cooperativa. La propuesta incluyó un temario enfocado en la seguridad alimentaria, calidad e inocuidad, enfermedades transmitidas por alimentos (ETAS), Buenas Prácticas de Manufactura (BPM), rotulado nutricional y normativas vigentes.
Los participantes, entre ellos productores asociados, vendedores, trabajadores de apoyo logístico y técnicos de laboratorio del INTA, rindieron la evaluación final que les permitirá acceder al carnet habilitante. Este documento es indispensable para quienes manipulan, almacenan, transportan o comercializan alimentos y sus materias primas, ya que garantiza prácticas seguras en toda la cadena.
La capacitación refuerza el trabajo articulado entre la Subdirección de Alimentos y la Cooperativa, que busca no solo cumplir con las normativas sanitarias, sino también potenciar la producción de miel bajo estándares de calidad diferenciados. En este sentido, las acciones se enmarcan en el protocolo de la Indicación Geográfica (IG) de la Miel de Azahar de Limón de Tucumán, un sello que distingue la producción local en mercados nacionales e internacionales.
Desde la organización destacaron que esta iniciativa es un paso clave para fortalecer la competitividad del sector apícola, mejorar la trazabilidad de los productos y asegurar la inocuidad alimentaria. Además, se anunció que en adelante se continuará con auditorías conjuntas entre la Subdirección de Alimentos y el INTA Famaillá, para garantizar el cumplimiento de los requisitos del protocolo de IG y consolidar el posicionamiento de la miel tucumana.
De esta manera, productores y técnicos suman herramientas fundamentales para sostener el crecimiento del sector apícola provincial, donde la calidad, la identidad de origen y la capacitación constante se convierten en pilares estratégicos para el desarrollo sustentable.