Por Agroempresario.com
La campaña 2025/26 del maíz en Córdoba muestra señales de recuperación tras los desafíos productivos de los últimos ciclos. Según un informe de la Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA), la superficie sembrada proyectada alcanzaría 2,9 millones de hectáreas, lo que representa un incremento del 15% respecto al ciclo previo y un 28% por encima del promedio histórico de la provincia.
El crecimiento de la superficie se da en un contexto de mayor disponibilidad hídrica y menor riesgo del complejo del achaparramiento del maíz, factores que influyen directamente en las decisiones de los productores. La distribución de las fechas de siembra mantiene predominio de las tardías, con un 65% de las hectáreas sembradas después del 1 de noviembre y un 35% antes de esa fecha, aunque se observa un leve aumento en las siembras tempranas, especialmente en la zona sur de Córdoba.
En la región sur, la proporción de maíz temprano/tardío pasaría de 35/65 a 39/61, un ajuste atribuido a la menor presión de la plaga D. maidis y al aporte hídrico proporcionado por las lluvias registradas en julio y agosto. En tanto, en el centro y norte provincial, la distribución se mantendría similar a la campaña pasada, reflejando precaución frente al complejo del achaparramiento, que afectó notablemente la campaña 2023/24.
El control del maíz guacho se consolidó como un actor clave en la lucha contra D. maidis, al ser este el único alimento disponible para la plaga en invierno. La erradicación de este maíz voluntario permitió disminuir el impacto del insecto y garantizar mayor sanidad para los cultivos de maíz temprano y tardío.
En cuanto a la producción del ciclo anterior, el maíz 2024/25 cerró con un rinde ponderado de 79,7 quintales por hectárea, casi un 20% superior al obtenido en la campaña 2023/24, a pesar de que la superficie total sembrada había disminuido un 22%. La superficie no cosechada representó el 12%, un descenso frente al 17% de la campaña previa, reflejando mejores prácticas de manejo y condiciones climáticas más favorables.
La distribución de rindes por zona también mostró mejoras significativas. En los departamentos del centro-norte provincial, más afectados por el complejo del achaparramiento en 2023/24, los rendimientos fueron un 25% inferiores al promedio zonal; sin embargo, en 2024/25 lograron superar el promedio en un 9%, evidenciando la recuperación productiva y el impacto positivo de la planificación de siembra y manejo de plagas.
El informe de la BCCBA también destaca que la rentabilidad para la campaña 2025/26 muestra mejores resultados para el maíz temprano, seguido de la soja de primera, incentivando a los productores a priorizar estrategias que optimicen la producción y minimicen riesgos frente a eventos climáticos o fitosanitarios.
La proyección de la superficie sembrada de maíz, junto con la distribución estratégica de fechas de siembra, constituye un indicador positivo para la cadena agroindustrial de Córdoba, que busca consolidar su posición en el mercado nacional e internacional. Además, la combinación de mejoras en rindes, control de plagas y disponibilidad hídrica favorece la competitividad del cereal, reforzando su rol como cultivo clave en la provincia.
En resumen, la campaña 2025/26 de maíz en Córdoba muestra signos claros de recuperación y crecimiento. La superficie proyectada de 2,9 millones de hectáreas, la mejora en los rendimientos y la gestión del complejo del achaparramiento consolidan al maíz como un cultivo estratégico. La planificación de fechas de siembra, la atención a factores climáticos y el control de plagas son determinantes para mantener la productividad y asegurar la competitividad de la provincia frente al contexto nacional e internacional.