Bovinos: claves para el éxito del destete precoz y de la primera recría de terneros

uando el destete precoz y la primera etapa de la recría se implementan adecuadamente se produce un fuerte impacto en el sistema ganadero, incrementando todos los parámetros productivos y reproductivos. Los principales beneficios de estas prácticas según Aníbal Fernández Mayer, especialista del INTA Bordenave.

El destete precoz se aplica con el objetivo de mejorar el estado corporal de la vaca y, con ello, aumentar su índice de preñez. La técnica consiste en separar al ternero de la madre en forma temprana (2-3 meses de edad con 70 a 80 kilogramos de peso vivo) y llevarlos, durante 15 a 20 días, a un corral o potrero. En este sentido, es prioritario asegurar el acceso a un concentrado energético y proteico de alta calidad “a voluntad”, y previo acostumbramiento junto a fibra (rollos, fardos, entre otros).

“El destete precoz, bien realizado, permite mejorar el balance nutricional de los vientres y de los terneros, cubriendo tanto los requerimientos energéticos como proteicos. Este mejor manejo nutricional se refleja en el aumento del peso vivo, la mejora de la condición corporal y se incrementan las manifestaciones tempranas de celos fértiles; todo esto ayuda a incrementar los índices de preñez”, precisa Mayer.

Posteriormente, continúa la primera recría (o destete anticipado) con forraje fresco de alta calidad “a voluntad” y un concentrado energético-proteico en función de la calidad de ese forraje.

El productor puede optar entre el destete tradicional o el precoz, evaluando la practicidad y los costos que mejor se ajusten al  sistema productivo de su empresa ganadera.

Las ventajas

Los establecimientos que implementan ambos tipos de destete obtienen varios beneficios:

1- Categorías de animales para hacer el destete precoz o anticipado, como vaquillonas de primer parto para que se queden preñadas rápidamente; vacas CUT, que al destetar el ternero permite engordarlas adecuadamente para su venta; y vacas que, por un motivo u otro, se atrasan en quedar preñadas. En este último caso, gracias al destete precoz o anticipado, recuperan estado corporal y quedan preñadas rápidamente, incrementando los terneros cabeza (concentración de partos).

2- Recuperación del estado corporal de los vientres destetados. Ambas técnicas producen un “balance energético positivo”, es decir, acumulan reservas, mejorando el estado corporal y el reinicio de la actividad ovárica.

3- Efectos sobre las vaquillonas de primer parto. El destete temprano del ternero les permite reiniciar los ciclos estrales –mayor tasa de preñez y menor intervalo entre parto–.

4- Mayores índices de destete, incremento de carga animal y ganancia de peso.

5- Incremento de la carga animal. Cuando se utiliza estratégicamente la combinación de los destetes puede realizarse un manejo más eficiente e intensivo de los recursos forrajeros de buena calidad con el consiguiente aumento de la carga (animales/ha).