Diversas petroleras independientes estadounidenses están en las etapas finales de análisis para ingresar en el yacimiento de Vaca Muerta, uno de los reservorios de shale gas y petróleo más grandes del mundo, luego de que el reciente acuerdo político y comercial entre Estados Unidos y Argentina comenzara a abrirles la puerta a nuevas oportunidades de inversión en el país.
Hasta ahora, Continental Resources, del magnate Harold Hamm, fue la primera compañía en confirmar su interés, tras la adquisición de la concesión Los Toldos II Oeste a Pluspetrol. Sin embargo, fuentes de la industria señalan que al menos otras dos o tres firmas de origen estadounidense estarían próximas a anunciar formalmente su desembarco. Entre ellas, destacan Devon Energy y Diamondback Energy, con producciones cercanas a las 850.000 y 943.000 barriles diarios equivalentes, respectivamente, según información de la industria aportada por Forbes.
El marco de este movimiento se estrecha en un contexto en el que la agenda política, los beneficios económicos y la reducción en el riesgo país repercuten de forma favorable para captar inversión extranjera. Expertos como Sebastián Borgarello, Vicepresidente y Jefe Global de Energy Consulting de S&P Global, explican que el acuerdo comercial incrementa significativamente las probabilidades de que estas firmas americanas inviertan en Vaca Muerta. "El acuerdo aumenta la confianza en la estabilidad del país y permite un acceso más fácil a los mercados de capital a tasas razonables, lo que es vital para financiar nuevas operaciones", afirmó Borgarello.

La reducción del riesgo país en las últimas semanas ha despertado una ola de colocaciones de deuda por parte de empresas argentinas vinculadas al sector Oil & Gas por un total de aproximadamente 3,4 mil millones de dólares, con empresas líderes como YPF, que emitió 1.200 millones, y Tecpetrol, con 750 millones, evidenciando un mayor apetito para la inversión. Estas señales también incentivaron a firmas como Pluspetrol y Pampa Energía, que trabajan en evaluaciones para seguir este camino.
El acuerdo, además, promete aliviar costos operativos y facilitar el acceso a tecnología de punta, temática que fue destacada por miembros de la industria. Cranio destacado es la expectativa de que la eliminación de barreras comerciales reduzca en torno al 30% los costos de importación de insumos y maquinaria, permitiendo implementar una producción más eficiente y competitiva. La possible implementación de reformas impositivas y laborales en el congreso durante el verano también aportaría a la reducción de los costos y a la mejora de la competitividad del sector.
“Este vínculo más estrecho con Estados Unidos también tiene efectos en la percepción del riesgo y en la estabilidad económica que busca incentivar nuevas inversiones en exploración y explotación de hidrocarburos en Vaca Muerta”, afirmó Ariel Bosio, vicepresidente de la Cámara Argentina Texas, en una entrevista con Forbes.
No obstante, uno de los obstáculos más relevantes sigue siendo la disponibilidad de equipos de perforación necesarios para sostener la expansión del sector. La industria señala que la demanda de rigs y maquinaria especializada podría incrementarse en aproximadamente un 50% en el próximo año, pero aún existe una brecha en la importación y disponibilidad de estos equipos. La importación de maquinaria usada, permitida hace unos meses, fue un primer paso, pero no alcanza para cubrir toda la demanda proyectada.
Desde las empresas, también se advierte que la implementación de políticas públicas que favorezcan la reducción de tarifas y la simplificación de trámites sería fundamental para consolidar este proceso de expansión. Empresarios y expertos coinciden en que si Argentina logra mantener un marco regulatorio estable y transparente, el país podrá captar capital extranjero en volumen y calidad, renovando la competitividad local en un sector que requiere fuerte inversión a largo plazo.
En conclusión, las señales positivas que envía la mejora en las relaciones diplomáticas y comerciales, junto con los beneficios económicos derivados de la construcción de un entorno favorable, han generado expectativas de que empresas estadounidenses de shale continúen sumándose en los próximos meses, consolidando a Vaca Muerta como uno de los destinos preferidos para la expansión del petróleo y gas de Estados Unidos en el hemisferio sur, según destacó Forbes.