El Gobierno de Tucumán anunció este miércoles que desembolsará $1.000 millones para asistir a unos 5.500 trabajadores del sector azucarero mediante el plan interzafra, un programa clave para sostener ingresos durante los meses en los que la actividad industrial se detiene. La medida fue oficializada por el gobernador Osvaldo Jaldo tras la firma de un acta acuerdo con los gremios FOTIA, FEIA, UATRE y STIA, y tendrá vigencia durante diciembre de 2025 y enero de 2026, los meses críticos para los empleados temporarios de la industria.
El acto de firma contó con la presencia del ministro de Gobierno y Justicia, Regino Amado, el secretario de Trabajo, Andrés Galván, y funcionarios del área de Gobierno y Relaciones Institucionales, además de representantes gremiales encabezados por Roberto Palina, Sergio Ogas, Claudio Romero Pereyra, Germán Ferrari y Juan Correa. Según lo establecido en el documento oficial, el aporte provincial se fundamenta en la necesidad de “preservar la paz social” y proteger a los trabajadores frente a la estacionalidad propia del sector.
Jaldo explicó que la decisión se enmarca en la continuidad de una política sostenida de apoyo al empleo rural, especialmente en una provincia cuya estructura productiva depende de las economías regionales. “Siempre el Estado provincial está presente en las diferentes actividades, tanto del sector industrial como del sector trabajador”, afirmó durante el encuentro. También recordó que, a lo largo del año, la Provincia intervino como mediadora en procesos paritarios para asegurar acuerdos viables entre empresas y gremios.
El gobernador destacó que la campaña azucarera del año finalizó con un rendimiento laboral más extenso que el habitual, producto de una zafra prolongada debido al volumen de materia prima. “Eso dio un poco más de trabajo a la gente, a los contratistas y a todos los que pertenecen directa o indirectamente a la actividad”, señaló. Asimismo, mencionó que la campaña citrícola también mostró signos de recuperación respecto a 2024, con menor stock inicial y reactivación de mercados externos.
En su mensaje a los gremios, Jaldo pidió mantener una articulación permanente entre el sector público y el productivo, destacando que la protección del empleo es una responsabilidad compartida. “Cada zafra tiene sus particularidades. No todas son iguales. Pero siempre nuestra obligación es preservar el eslabón más chico de esta cadena productiva, que es el trabajador”, sostuvo.
Los referentes sindicales coincidieron en la importancia del acuerdo. Germán Ferrari, de UATRE, explicó que el beneficio permitirá cubrir a los trabajadores que quedaron fuera del plan nacional de intercosecha. Según detalló, unas 4.000 personas no habían podido completar los requisitos administrativos, como acreditar entre tres y diez meses de actividad. “Con esto vamos a cubrir a la mayoría de esos trabajadores”, afirmó, y valoró que la provincia garantice un auxilio económico en un periodo donde las alternativas laborales son prácticamente inexistentes.
Desde FOTIA, Roberto Palina aseguró que la asistencia es fundamental para los trabajadores temporarios azucareros y explicó que el monto asignado a cada gremio será proporcional a su número de afiliados. También indicó que el aporte fue actualizado en línea con la inflación acumulada del año. “La provincia se hace cargo del monto total hasta que el Ministerio de Trabajo de la Nación retome los pagos”, señaló, en referencia a la expectativa de reinicio de los programas nacionales hacia febrero de 2026.

Por su parte, el ministro Regino Amado subrayó que la medida fue posible gracias a una decisión política expresa del Poder Ejecutivo. “Más de 5.500 son los beneficiarios representados por las organizaciones gremiales”, afirmó, y remarcó que el Gobierno mantuvo un diálogo permanente con los sindicatos durante toda la campaña. También recordó que, horas antes, el Ministerio de Economía había presentado un análisis de la temporada azucarera y citrícola, que permitió dimensionar el esfuerzo financiero que implicará el nuevo subsidio.
A lo largo del encuentro, los representantes sindicales también abordaron cuestiones vinculadas al desplazamiento de trabajadores hacia otras provincias durante el receso productivo. Jaldo pidió que estos traslados se realicen de manera organizada para evitar que los empleados queden en situaciones de vulnerabilidad o sin garantías de empleo. “Eso también le pido que lo hagamos lo más ordenadamente posible”, sostuvo, y destacó la importancia de sostener una buena relación interprovincial para asegurar continuidad laboral.
Aunque la campaña azucarera mostró buenos indicadores productivos y un alto nivel de actividad, los dirigentes advirtieron que el precio del azúcar no acompañó el rendimiento. Sin embargo, la mayor cantidad de días trabajados permitió a los empleados acceder a vacaciones, medio aguinaldo y liquidación final. “Este año ha sido una buena campaña en materia azucarera”, resumió Palina, aunque evitó pronunciarse sobre la situación del ingenio Concepción, cuya posible venta viene siendo tema de debate en la industria desde hace dos años. “Hasta ahora solo se ha quedado en trascendidos”, señaló.
El plan interzafra es un mecanismo recurrente en Tucumán, donde se activa cada diciembre y enero para compensar el cese temporal de la actividad. En esta oportunidad, el monto global asciende a $1.000 millones, que serán administrados por los gremios para distribuir entre sus trabajadores. El aporte provincial se complementará con la expectativa de que Nación retome la asistencia hacia fines de enero o febrero.
La medida fue celebrada por los cuatro sindicatos, que destacaron que el apoyo evitará que miles de familias queden sin ingresos durante el receso productivo. Para Jaldo, el anuncio reafirma la necesidad de sostener la alianza entre el Estado y los sectores productivos. “Las cosas las tenemos que hacer ordenadas y prolijas, porque nuestra gente necesita del trabajo para llevar el pan dignamente a su familia”, concluyó.