La tradicional cadena de helados Freddo anunció un giro estratégico en su operación en Argentina: retomará el control de parte de sus locales, invertirá US$ 4 millones para adquirir 16 franquicias y proyecta la apertura de más de 30 tiendas nuevas en el país y la región a partir del próximo año. El movimiento, que redefine el modelo de negocios de la compañía, busca reforzar su presencia en el mercado local y potenciar su expansión internacional en un contexto más favorable para el consumo. Los detalles de este cambio fueron revelados recientemente, según informó Forbes, en el marco de un plan integral de reposicionamiento.
El objetivo central de la compañía es volver a operar de manera directa puntos estratégicos de su red comercial, un esquema que había abandonado en 2018 cuando decidió franquiciar el 100% de sus locales en la Argentina. La decisión responde a lo que la empresa considera un nuevo escenario económico y comercial, con mejores condiciones para la inversión y una recuperación sostenida de la demanda.
"En 2018 la compañía decidió franquiciar el 100% de sus locales en la Argentina. Pero el contexto actual es otro", explicó Raúl Mandía, CEO de Freddo. “Por eso volvemos a apostar y, desde el próximo año, retomaremos la operación directa”. El directivo detalló que la decisión apunta a mejorar la experiencia del consumidor, factor clave dentro del rediseño de la marca.
Dentro del paquete de tiendas que volverán bajo administración directa figuran sucursales ubicadas en Puerto Madero, Palermo, Paseo Alcorta, Unicenter y Plaza Oeste, consideradas por la empresa como espacios de alto valor estratégico por su ubicación y flujo de visitantes. Las obras de reacondicionamiento, que comenzarán tras la toma de control, apuntarán a modernizar integralmente la estética y funcionalidad de los locales.
El plan de inversión incluye un nuevo diseño de tiendas, con espacios más amplios, iluminación cálida y una estética que combina tradición con modernidad. El proyecto incorpora también una ampliación de la propuesta de cafetería, un segmento que Freddo busca robustecer para generar mayores momentos de consumo y atraer nuevos públicos. La apuesta por este formato responde a una tendencia regional: los helados premium conviven cada vez más con productos complementarios como cafés especiales, pastelería o formatos para compartir.
El crecimiento de la demanda respalda la estrategia de expansión. Mandía subrayó que la empresa registró una suba del 7% interanual en volumen de ventas de helado, con un repunte significativo durante el primer semestre. Según sus palabras, la mejora en la rentabilidad acompaña la tendencia favorable y permite proyectar nuevas inversiones en la red comercial.
Freddo opera con dos unidades de negocio: por un lado, el retail en supermercados, donde ofrece líneas de productos preenvasados; por otro, el abastecimiento de helados y propuestas gastronómicas a sus tiendas, tanto propias como franquiciadas. Si bien el segmento retail representa alrededor del 20% del negocio, Mandía reconoció que atraviesa un proceso de fuerte crecimiento y que la compañía trabaja para ampliar su oferta con productos derivados.
Entre las novedades previstas para esa unidad, la firma anticipa el lanzamiento de alfajores inspirados en sabores emblemáticos de la marca, una estrategia orientada a fortalecer el reconocimiento del consumidor fuera del canal de tiendas físicas. La diversificación responde, además, a la creciente demanda de productos premium listos para consumir, una tendencia en alza en supermercados y tiendas de conveniencia.
En paralelo al relanzamiento local, Freddo mantiene una fuerte presencia internacional y planea profundizarla. Con más de 25 locales en Uruguay, cerca de 30 en Brasil y casi 10 en Chile, la marca se consolidó en mercados vecinos y ahora busca potenciar esa expansión con la apertura de 29 nuevos locales fuera de Argentina.
Los destinos elegidos incluyen tres nuevos puntos en Uruguay, cuatro en Chile, ocho en Brasil, siete en los Estados Unidos, seis en México y uno en Perú. Esto permitirá reforzar la presencia en países donde Freddo ya opera y expandir su alcance en ciudades con alta demanda de productos premium y comunidades latinoamericanas relevantes.
Mandía señaló que no está previsto desembarcar en nuevos mercados en esta etapa, dado que la prioridad es consolidar la presencia en aquellos países donde la marca ya cuenta con reconocimiento y capacidad operativa instalada. Esta estrategia de “crecimiento concentrado” permite optimizar costos, acelerar los procesos de apertura y garantizar uniformidad en la calidad del producto.
La importancia del negocio internacional se refleja en su peso relativo: actualmente representa el 45% de los ingresos totales de la compañía. Este indicador cobra relevancia al considerar que Freddo pertenece al Grupo Pegasus, uno de los holdings de inversión más activos en la región, con inversiones diversificadas en gastronomía, retail, tecnología y servicios.
A mediano plazo, Freddo proyecta un crecimiento del 7% en volumen de ventas para el próximo año. Mandía explicó que esta proyección está respaldada por un contexto de mayor estabilidad macroeconómica, la apertura de importaciones y la disponibilidad de insumos clave para el sector. En su visión, la combinación de expansión local, fortalecimiento internacional y renovación del modelo de tiendas permitirá consolidar a Freddo como referente regional en helados premium.
La apuesta por recuperar el control de locales clave también busca reforzar la consistencia en el servicio y la calidad del producto, dos atributos que la marca considera centrales para sostener su posicionamiento histórico. En los últimos años, la expansión mediante franquicias permitió acelerar la llegada a nuevas zonas, pero también generó desafíos de estandarización que la empresa se propone corregir en esta nueva etapa.
Para el mercado, el movimiento de Freddo marca una señal de confianza en la recuperación del consumo argentino y se suma a una tendencia creciente: varias compañías del rubro gastronómico y del retail están retomando la operación directa de sus tiendas más rentables para ganar eficiencia, mejorar la experiencia del cliente y trabajar con mayor flexibilidad en la adaptación de propuestas.
Con más de 115 locales en Argentina y 86 en el exterior, Freddo encara una nueva fase en su historia centenaria. La combinación de inversión, reposicionamiento y expansión regional podría convertirse en uno de los casos más relevantes de reconversión empresarial en el sector gastronómico del país.
