Leticia Fenoglio, CEO y cofundadora de Rapanui y Franui, fue distinguida como CEO Innovadora del año en una ceremonia organizada por El Cronista, la revista Apertura y PwC Argentina, un reconocimiento que pone en primer plano su trayectoria empresarial y el proceso de crecimiento internacional de una compañía de origen patagónico que logró posicionarse en los principales mercados del mundo. El premio fue entregado el 17 de diciembre de 2025, en Buenos Aires, y resulta relevante por consolidar un caso argentino de innovación, construcción de marca y escalabilidad global en el sector de alimentos premium, según informó El Cronista.
Fenoglio no pudo estar presente en el evento debido a un viaje de trabajo a Valencia, donde la empresa cuenta con una de sus plantas productivas estratégicas para el mercado europeo. Antes del inicio formal de la ceremonia se proyectó un mensaje grabado en el que la ejecutiva agradeció la distinción y subrayó el rol que ocupa la innovación dentro de la cultura de la compañía. “Para nosotros, innovar es parte de nuestro ADN. Decimos que somos una casa de creadores porque crear es lo que más nos apasiona”, expresó Fenoglio en el video difundido durante el acto, en declaraciones citadas por El Cronista.
La mención a Valencia no fue casual. Allí, la compañía puso en marcha dos nuevas líneas de producción destinadas a su producto estrella, Franui, lo que permitirá elevar la capacidad anual de fabricación de 40 millones a 120 millones de potes. El objetivo de corto plazo, de acuerdo con los planes de la empresa, es alcanzar los 200 millones de unidades anuales, un salto productivo que acompaña la fuerte demanda internacional del producto.
La trayectoria de Fenoglio dentro del grupo empresarial comenzó hace más de dos décadas, cuando se incorporó al negocio familiar fundado por su padre, Diego Fenoglio, en 2004. A lo largo de los años fue asumiendo distintas responsabilidades hasta quedar a cargo de la estrategia comercial y de marketing en 2009, un punto de inflexión que resultó clave para impulsar la expansión de Rapanui más allá de Bariloche. En 2013 fue designada CEO de la compañía, rol que mantiene hasta la actualidad y desde el cual lidera el proceso de profesionalización, crecimiento y proyección internacional.
Rapanui nació en Bariloche y construyó su identidad a partir de una tradición chocolatera de casi 80 años en la ciudad. Con el tiempo, la empresa amplió su propuesta y consolidó un modelo que combina producción artesanal, innovación constante y una fuerte apuesta por la experiencia de marca, tanto en sus locales como en el diseño de productos y la comunicación. Esa combinación sentó las bases para el desarrollo de nuevos productos con potencial global.
Uno de los hitos centrales de esa estrategia fue la creación de Franui, la frambuesa bañada en chocolate desarrollada en 2013. El producto se convirtió en un caso emblemático dentro del segmento de alimentos premium y marcó un antes y un después para la compañía. Su diferencial —fruta patagónica congelada cubierta con chocolate— permitió a la marca construir una identidad propia y reconocible en mercados muy diversos. En 2020, Franui inició su desembarco internacional y, desde entonces, su crecimiento fue sostenido.
Actualmente, Franui se comercializa en más de 40 países y se transformó en el principal motor de la expansión internacional de Rapanui. Su éxito permitió llevar una marca argentina al mundo con un producto de alto valor agregado, adaptado a las particularidades de cada mercado sin perder su identidad original. A comienzos de 2025, la marca comenzó a venderse en Australia y Países Bajos, donde cerró un acuerdo con Albert Heijn, la mayor cadena de supermercados de Holanda, para su distribución en góndolas.
Además, la empresa ya tiene contratos firmados para iniciar su comercialización en Estados Unidos y París, y se prepara para desembarcar en Sudáfrica, que se convertiría en su segundo mercado africano luego de Marruecos. En paralelo, la compañía avanza en negociaciones para cerrar un acuerdo con Starbucks que permitiría distribuir Franui en tiendas de Francia, Luxemburgo y Bélgica, ampliando aún más su presencia en Europa.
En distintas oportunidades, Fenoglio señaló que uno de los principales desafíos del presente es sostener la esencia de la compañía en un contexto de crecimiento acelerado. Su estilo de gestión se apoya en la cercanía, la escucha activa y la presencia cotidiana en los distintos espacios de trabajo, desde las plantas productivas hasta los locales comerciales. Esa visión se refleja también en su concepción del liderazgo. “Las empresas crecen cuando crece su gente. Y lograr que cada persona sienta el propósito de la compañía es una de las partes más importantes de llevar adelante un proyecto”, afirmó, en declaraciones citadas por El Cronista.
El reconocimiento fue recibido en su nombre por Diego Fenoglio, fundador de Rapanui, quien subió al escenario para recibir la estatuilla de manos de Florencia Pulla, editora general de El Cronista. “Estoy orgulloso por recibir este premio en nombre de mi hija. Este es un reconocimiento a la lucha apasionada que tenemos hace más de 20 años para construir una compañía”, señaló el empresario durante la ceremonia, según consignó el medio.
Diego Fenoglio también destacó el impacto emocional que generan los productos de la marca en los consumidores, un aspecto que considera central en la construcción de Rapanui y Franui. “Lo vemos cuando los chicos y los grandes prueban nuestros chocolates, los helados y también el Franui”, expresó, en palabras reproducidas por El Cronista.
El premio a CEO Innovadora del año reconoce así a una empresaria que logró transformar una compañía de origen patagónico en una marca con proyección global, apoyada en la innovación permanente, el desarrollo de equipos y una identidad clara que se mantiene aun en plena expansión internacional. En un contexto desafiante para las empresas argentinas, el caso de Leticia Fenoglio se consolida como un ejemplo de cómo escalar un proyecto local hacia el mundo sin resignar origen ni valores.
