Las compras de dulces han aumentado significativamente en Suecia debido, principalmente, a los viajes que hacen los noruegos para aprovisionarse de estas golosinas a un menor precio.
El incremento de este tipo de compras fronterizas está directamente relacionado con el aumento de los impuestos a los dulces y a las bebidas azucaradas en Noruega a principios de 2018. Actualmente, el impuesto a las bebidas azucaradas es de US$0,6 por litro.
Por ese motivo, los noruegos viajan a Suecia en busca de dulces, ya que allí no existe un impuesto al azúcar. Además, los productos suelen ser más económicos debido a los acuerdos aduaneros con la Unión Europea.
Mats Idbratt, jefe de operaciones de veinte tiendas Gottebiten ubicadas en la frontera, sostuvo que, desde que se impuso el impuesto a los productos azucarados en el vecino país en el mes de enero, observaron un incremento del 10% en las ventas.
Actualmente, uno de cada seis niños noruegos tiene sobrepeso, en comparación con Reino Unido, donde uno de cada tres niños posee sobrepeso. La ministra de Salud Pública de Noruega, Ase Michaelsen, señaló: “Logramos estabilizar la obesidad infantil y en los jóvenes”.
Asimismo, remarcó que eso “significa que lo que hemos hecho hasta ahora ha estado funcionando, aunque también tenemos muchas campañas sobre comer cinco vegetales verdes al día, más frutas, pescado, productos de granos integrales y, por supuesto, sobre hacer ejercicio al aire libre”.
Además, el gobierno noruego impulsó a las empresas a disminuir el nivel de azúcar en sus productos. Hasta el momento, alrededor de setenta empresas pactaron una reformulación de sus recetas, con una reducción de hasta un 80% del contenido de azúcar.