Pablo Villano: "La manera de enfrentar la crisis del sector lácteo es con el asociativismo"

Fundada hace 29 años, la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (Apymel) nuclea a 160 empresas distribuidas en seis provincias, las cuales procesan alrededor de cinco millones de litros de leche diarios, que son recolectados de 3.000 tambos.

Pablo Villano, presidente de la entidad, contó en el congreso “Argentina, Supermercado del Mundo” qué le ofrece Apymel a sus socios y cuáles son los principales proyectos en cartera. Además, destacó la importancia del asociativismo en lo que hace a la exportación de productos lácteos.

En primer lugar, Villano señaló que hace seis años crearon una plataforma de exportación con el objetivo de generar mayor valor agregado y no quedarse sólo con el abastecimiento al mercado local. “Teníamos que tener un excedente exportable, con una oferta de calidad tanto en leche, en sueros y en quesos”, indicó.

En ese sentido, dijo que trabajaron en “programas de asociativismo y de calidad de producto”, así como en “incrementar la cartera de clientes y desarrollar nuevos mercados de exportadores”.

Con respecto a las acciones concretadas por dicha plataforma, el ejecutivo expresó que han tenido “diez millones de misiones comerciales, cinco misiones inversas, ocho rondas de negocios y veinte ferias internacionales”, para las cuales contaron “con el apoyo de organismos oficiales”. Gracias a ello, lograron pasar de sólo cinco empresas habilitadas para exportar al momento de la creación de la plataforma a las más de treinta que existen actualmente.

A su vez, Villano señaló que la plataforma permitió que cada vez sean más las empresas que no sólo estén en condiciones de “largar una mercadería con óptimo resultado al mundo, sino también al mercado local”.

En cuanto a la calidad, dijo que para obtenerla trabajan con determinadas normas, pensando también en la infraestructura, el medio ambiente y la innovación tecnológica, a través de un grupo de asesores que trabajan con Apymel en una búsqueda constante por “mejorar todos los procesos y ser lo más eficientes posible”.

En relación a los proyectos asociativos, Villano mencionó tres: el de un consorcio exportador, que es extensible a todos los miembros de Apymel que estén dispuestos a ofrecer sus productos; proyectos de exportación de leche y suero en polvo; y de cámaras de maduración, centro de trozado y feteado de quesos. En referencia a esto último, sostuvo que la idea es poder realizar en conjunto esas acciones que a una pyme se le dificulta ejecutar de manera individual para, de esa forma, disminuir los costos y ganar eficiencia. Y agregó: “La manera de enfrentar la crisis del sector lácteo a nivel internacional y local es con el asociativismo”.

Por otro lado, el presidente de Apymel dijo que donde más énfasis están poniendo es en el financiamiento, ya que para las pymes “es muy difícil cumplimentar todos los requisitos que exige un banco”. Por ello, sostuvo que han conformado una SGR (Sociedad de Garantía Recíproca), la cual no sólo servirá para financiar a las pymes, sino también a los productores y a los proveedores. Con respecto a los tamberos, consideró que “es fundamental que ellos también se vayan modernizando, cambiando sus maquinarias y sus equipos de frío”.

Asimismo, contó que están “detrás de un fondo de reconversión industrial, que es básico para que las pymes ganen en competitividad y eficiencia”. En paralelo, afirmó que están “trabajando con el Estado para conseguir créditos que tengan cada vez menos tasas y más años de financiamiento”, ya que a las pymes “no les sirve tener tres o cuatro años de plazo para pagar una maquinaria”, sino que “hay que hablar de ocho o diez años en adelante”. Y agregó: “Hemos desarrollado un censo en todas las provincias para analizar la situación de las pymes lácteas, y las necesidades que tenemos en materia de infraestructura y modernización”. 

Por último, explicó que ante la necesidad de “llegar al público con locales propios de los socios”, se instauró hace dos años la celebración de la semana del queso, a través de la cual se empezó a “estimular a los socios a que tengan canales de comercialización directos de fábrica”.