esde hace dos décadas, la empresa agroindustrial Oleos del Centro innova en ganadería y apuesta al potencial productivo del noroeste argentino. De la producción de carne al bioetanol, la burlanda y el biogás. El éxito de sus establecimientos santiagueños y las claves para la diversificación de la explotación ganadera.
Oleos del Centro está vinculada a los grupos CREA. Integrada por Luis Magliano, Oscar Ferrero y Damián Manzanelli, la empresa genera cuarenta puestos de trabajo en diferentes establecimientos ubicados en Santiago del Estero, todos dedicados a la agricultura y ganadería de ciclo completo. Sus operaciones se encuentran en las localidades de Weisburd y Campo Gallo, totalizando unas 3.000 hectáreas dedicadas a la agricultura y unas 7.000 a la ganadería.
La empresa cuenta con un feedlot de 5 mil vacunos, lo que le permite obtener novillos desde los 350 kilogramos.
Sumado a esto, produce unas 20 mil toneladas de maíz, 6 millones de litros de etanol, burlanda como subproducto, y soja en dos de sus establecimientos.
La empresa cuenta con tres establecimientos: El Manso, Alto Verde y Las Palmitas. Este último está habilitado para la exhortación de cortes Hilton a la Unión Europea. “Poseemos 12 mil cabezas en total y los rodeos están formados por las razas sintéticas Braford y Brangus”, indica Luis Magliano.
Por otro lado, los socios son propietarios del 50% de la Cabaña Pilagá, dedicada a la recría. La hacienda de recría está repartida en los tres establecimientos, con un registro anual de 400 kilogramos por hectárea en la producción de carne.
La producción de maíz alcanza las 20.000 toneladas anuales y obtienen otras veinte mil mediante acuerdos con productores vecinos. “Con nuestros vecinos tenemos acuerdos para todo el año que nos permiten recibir una asignación semanal de granos, por lo que ellos reciben previsibilidad y nosotros tenemos asegurados los insumos”, concluye Magliano.
Uno de los objetivos de la empresa es la producción de carne sin antibiótico. En este sentido, se realizan pruebas con un producto obtenido a base de enzimas y esporas de hongos que actúan sobre la digestibilidad de la fibra.