entro de las mejoras físicas del suelo encontramos el atenuado de las pérdidas de suelo por erosión eólica e hídrica, la mejora en la captación de agua, la reducción el impacto de la gota de lluvia, o encostramiento superficial, además disminuyen la temperatura del suelo, reducen riesgos de salinización por ascenso capilar desde napas, reducen la evaporación incrementando la eficiencia de conservación y disponibilidad de agua en el perfil, disminuyen la lixiviación de nutrientes, disminuyen la susceptibilidad a la compactación favoreciendo la resiliencia del sistema, disminuyen la presión de malezas y el uso de herbicidas. Como así también mejoran la actividad microbiológica del suelo.
Los rastrojos pueden ser clasificados según la calidad y el volumen de aporte al suelo. Estos dependen principalmente del tipo de cultivo en cuestión. Las gramíneas aportan gran cantidad de rastrojos, pero tienen una alta relación C/N, por el contrario, las leguminosas, es mucho menor el aporte y con una baja relación C/N.
En el caso de un antecesor con gramíneas, la disponibilidad de N durante el cultivo siguiente se ve limitada, por una alta relación C/N del residuo -50-, por lo que se produce una inmovilización del N, mientras que un antecesor leguminosas esta relación es de 15 a 20, motivo por el cual la disponibilidad de N es inmediata.
Evaluar el comportamiento del cultivo de algodón ante dos situaciones de cultivos antecesores diferentes.
Objetivos Específicos:
El ensayo fue realizado en el establecimiento agropecuario El Toba de Martin hnos, ubicado a uno 20 km de la localidad de Sachayoj, Departamento Alberdi, provincia de Santiago del Estero.
El tipo de suelo es Argiustoles típicos. Los datos de fertilidad química indican un suelo relativamente nuevo, con pocos años de agricultura, bien provisto de carbono, nitrógeno y fósforo con valores bajos de C.E, suelo bien drenados, y un pH neutro a alcalino.
La siembra fue realizada con una sembradora neumática Super Walter de 20 surcos, distanciados a 0,76 m. y una densidad de siembra de 19 semillas por m lineal, 180.000 plantas/ha.
Las mediciones en el cultivo de algodón se hicieron en dos lotes contiguos, denominado Lote 1 con un cultivo antecesor de Maíz, de aproximadamente 300 ha, y Lote 2 con un antecesor Soja de 500 ha. En cada lote se trazó una transecta imaginaria de Norte a Sur y se tomaron 5 puntos de muestreos separados entre puntos por 125 m aproximadamente. En cada punto se hicieron las extracciones de suelo para fertilidad química, humedad gravimétrica, biomasa de cultivo, rendimiento de fibra y componentes de rendimiento, % al desmote en fibra.
La variedad utilizada de algodón fue la NuOpal BG/RR (semilla ácido deslintada), la siembra fue realizada en el lote 1, el 24-11-2013, y para el lote 2, tres días antes, el 21-11-2013.
Las fechas de muestreos fueron las siguientes: Siembra, 24/11/13 (1° extracción); Inicio del pimpollado, 30/12/13, 36 DDS (2° extracción); Inicio de floración, 27/01/14, 64 DDS (3° extracción); Fin de floración efectiva, 09/04/14, 136 DDS (4° extracción); Madurez de cosecha 13/06/14, 201 DDS (5° extracción)
Las temperaturas máxima y mínima promedio mensual y precipitaciones mensuales fueron registradas a través de una estación meteorológica automática marca Nimbus THP ubicada en el establecimiento, y distanciados a 5 km del experimento.
Las precipitaciones de la campaña 2013-14 fueron superiores en un 70% al promedio histórico (689mm), mientras que la campaña anterior (2012-13), se registraron un 30% menos de precipitaciones que el promedio histórico. Estas mayores lluvias durante la etapa de mayor crecimiento, influyo en el vigor de la planta, ocasionando que se mantenga por más tiempo verde, y se retarse la cosecha.
La campaña 2013-14 con respecto a las anteriores no presentaron diferencia en cuanto a temperaturas mínimas promedios mensuales entre Octubre a Junio. Mientras las temperaturas promedio mensuales máximas, a partir de diciembre, estuvieron por debajo del promedio, esto fue debido a un mayor número de días con lluvias.
La siembra del Lote 1 se hizo 4 días posteriores al del Lote 2. Los días hasta floración el Lote 1 experimentó un retraso de 3 a 4 días con respecto al Lote 2.
La cosecha del Lote 1 se produjo a los 215 días, mientras el Lote 2 a los 201. En los dos lotes el cultivo experimentó un alargamiento en el ciclo de más de 30 días. Este se debió principalmente por las precipitaciones registradas a partir de enero, acompañado de temperaturas óptimas para mantener en activo crecimiento al cultivo. Sumado a una buena fertilidad de los lotes con lo cual el algodón se mantuvo vigoroso por más tiempo.
Hubo interacción entre tratamiento y extracción (p-valor=0,012). La máxima acumulación de materia seca fue en el 4 muestreo y para el antecesor soja con 8400 kg ha-1, mientras con antecesor maíz alcanzo un 72% del valor ese. En los primeros muestreos 2 y 3 siempre produjo más materia seca el algodón con antecesor soja.
Carpenter-Boggs et al. (2000), observaron que al fertilizar los cultivos la mineralización de la materia orgánica del suelo aumentaba, debido a un incremento de la actividad microbiana.
Al evaluar que sucede con la cantidad de rastrojos de los cultivos antecesores, sobre el cultivo de algodón, se observó en el lote 1, con antecesor maíz, que las cantidades se mantuvieron en el tiempo. Mientras en el lote 2, con antecesor Soja, presentó mucha variabilidad en el tiempo, esto posiblemente a que la soja dejar un pobre volumen de rastrojo, acompañado por una baja relación C/N, lo que contribuye a una ligera mineralización.
Al momento de la siembra, el contenido de agua útil fue muy bajo para los 2 lotes, siendo que hasta los 60 cm estuvo cargado por arriba del 50% de agua útil, por debajo de esa profundidad el perfil estuvo muy seco. Esto se debió a que provenía de una campaña con escasa humedad (2012-13), con precipitaciones un 30% debajo del promedio histórico.
A partir de floración y en los muestreos sucesivos, el cultivo, atravesó muy buenas condiciones hídricas por lo cual no sufrió ningún tipo de estrés hídrico.
Desde el punto de vista de la humedad del suelo, la planta probablemente experimentó algún tipo de estrés durante los primeros 50 o 60 días desde la siembra. En la siembra y a los 35 días (pimpollado), el agua útil estuvo por debajo del 50% en la mayor parte del perfil.
A la siembra del algodón, y al comparar los dos lotes, se podría decir que el que provino del antecesor maíz extrajo una mayor cantidad de agua, en relación al de antecesor soja.
A floración del algodón (27-01-14), el lote con antecesor soja, estuvo más seco, probablemente por la mayor extracción de agua que hizo el cultivo de algodón al tener una mayor biomasa, en relación al que vino de antecesor Maíz.
El nitrógeno (N), es el nutriente que la planta absorbe en mayor cantidad. Este N es tomado por las raíces en forma de nitrato (NO-3), y esta es la forma que se lo determina en los laboratorios de suelos. Los dos lotes partieron de la misma cantidad NO-3 en los primeros 20 cm de perfil, sin embargó esto cambió a mayor profundidad, ya que el algodón con antecesor Soja, presentó mayores valores de NO-3 a las profundidades 20-40 y 40-60 cm. Si bien el maíz tiene una alta relación C/N, indicando una inmovilización del N, no así sucede con la soja, ya que deja una baja relación C/N, y el N queda disponible inmediatamente, además de ser una leguminosa que aporta N al suelo. La alta relación C/N en gramíneas produce una lenta mineralización del N. El lote con antecesor soja, deja N disponible en forma inmediata y se puede ver en el crecimiento del cultivo, al experimentar una mayor cantidad de biomasa en los muestreos realizados. Álvarez R. (2006) y Rodriguez et al. (2012) observaron una relación positiva entre suelos que contenía altas dosis de N lábil, con una alta tasa de absorción por los cultivos.
El algodón del lote con antecesor soja, tuvo mayor rendimiento de fibra en bruto que el antecesor maíz. Este último rindió un 25% menos en fibra que el lote con antecesor soja. La fibra de algodón también fue superior en el lote con antecesor soja, por el contrario, presento un menor valor para porcentaje al desmote.
La soja no agotó el N lábil como el maíz. La fijación simbiótica ayudó a que no existiera un agotamiento en el perfil y la baja relación C/N que acompaño a una mejor fertilidad química.
El cultivo de algodón tuvo un mejor comportamiento cuando su antecesor fue una leguminosa, ya sea por baja relación C/N y por el menor agotamiento de N lábil en el perfil del suelo. Esto se vio reflejado en la mayor producción de biomasa seca y en el rendimiento de fibra bruta. Mientras cuando el antecesor fue maíz, presentó mayor rastrojo al inicio del algodón, con una alta relación C/N, provocando una inmovilización del N. El contenido de agua útil, durante el ciclo del algodón, y para los dos lotes con antecesores diferentes, no presentaron mucha diferencia, ya que fue acompañado por precipitaciones abundantes a partir de enero. La mejor secuencia para el cultivo de algodón sería maíz, soja y algodón, ya que el maíz aporta volumen en rastrojo y la soja no agota el N del suelo.
INTA