Durante los últimos días, debido a las intensas lluvias y a los vientos que se produjeron en algunas zonas del área cañera, se observó una gran cantidad de cañaverales caídos.
Entre las zonas más afectadas por estos fenómenos se encuentran Los Aguirre, García Fernández, Los Bulacio, Delfín Gallo, la zona del ingenio Famaillá, Los Sosa, Los Ralos, Gastona, Los Sarmiento, Aguilares, Santa Ana, la zona del ingenio Santa Bárbara, Villa Belgrano y el este de Graneros.
Debido a esta situación, Atina Criado y Fernanda Leggio, del subprograma Agronomía de la Caña de Azúcar de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc), recordaron a técnicos y a productores algunos criterios y recomendaciones de manejo, que permiten minimizar los efectos adversos que provoca esta condición de los cañaverales.
Indicaron que en un cañaveral volcado o caído se registran típicamente algunos problemas que a continuación se detallan.
Crecimiento y maduración
- Reinicio del crecimiento de los tallos. Estos tienden a retomar la posición erecta -especialmente importante y notable en la porción apical o más joven de los tallos- , lo que provoca deformaciones y un despunte mucho más importante que en la caña erecta. La magnitud del problema depende de la fecha de vuelco y de las condiciones ambientales posteriores. Con el transcurso del tiempo -en general, desde agosto en adelante, y asociado con el aumento de las temperaturas- se observarán también problemas de brotación de las yemas laterales de la caña, de la formación de raíces -especialmente en los nudos del tallo en contacto con el suelo- y de la aparición de chupones. Además y desde temprano, se pueden verificar pérdidas de peso de los tallos y, por ende, una disminución del rendimiento cultural.
- Retraso de la maduración. Asociado a los procesos señalados, se registra un retraso de la maduración e, incluso, más adelante se observará un aumento del Brix% (sólidos solubles totales), asociado al aumento de azúcares reductores y de otras sustancias solubles, pero con una progresiva disminución del contenido de sacarosa (Pol% y Pureza%). Esto sera especialmente evidente a partir de los 45 a 60 días desde el vuelco del cañaveral. La velocidad de ocurrencia e intensidad de los daños señalados dependen de la magnitud y severidad del vuelco, de la fecha de ocurrencia y de las variedades afectadas.
Problemas en la cosecha
Seguidamente, las especialistas Criado y Leggio continuaron desarrollando otros problemas que se manifiestan en los cañaverales caídos.
- Mayores dificultades operativas. La velocidad de avance de la cosechadora en caña caída deberá ser menor, debido, principalmente, a la dificultad para seguir la línea del surco. Por otro lado, la apertura de melgas será más complicada y deberá hacerse con mayores cuidados para evitar el pisoteo de la caña sobre el suelo.
- Mayores pérdidas de materia prima en campo: en caña caída las pérdidas aumentan debido a la dificultad de levantar toda la caña que se encuentra en el piso. Estas pérdidas van a ser mayores cuando el vuelco se produzca en varias direcciones.
- Elevados contenidos de trash. A causa del vuelco, el despuntado resulta muy difícil o nulo, por lo que los niveles de materia extraña o trash se incrementarán. A medida de que la zafra avanza, en el cañaveral caído aparecen brotes de yemas laterales y chupones que agudizan el problema. Además, también aumenta el contenido de tierra en los tallos asociado a su mayor contacto con el suelo.
Suena a Campo