Suba de retenciones: la discusión pasa al Congreso y el campo comenzó el lobby para frenar la ley

“Ustedes miran la macro y nosotros la micro”, le cuestionó un dirigente rural a Juan Pazos, jefe de Gabinete del Ministerio de Economía durante el primer encuentro del campo con el flamante gobierno de Javier Milei. Por momentos, la discusión fue acalorada, al igual que la jornada que se vivió en la Capital Federal.

Durante la reunión, el Gobierno explicó el aumento de las retenciones al 15 % para todos los productos, salvo la soja que permanece en el 33 %. El argumento oficial es la situación de emergencia y la necesidad de un esfuerzo por parte de todos los sectores. Pero el gran planteo de la Mesa de Enlace fue el impacto en las economías regionales. 

“La suba se va a presentar a través del Congreso. Se trabaja en un proyecto de ley”, confirmó a Agrofy News una de las personas que se sentó en la mesa de discusión. De esta manera, la Mesa de Enlace ya diseña su estrategia: que el proyecto no avance en el Congreso.

La otra discusión fue el camino que usará el ministro Luis Caputo para lograr el incremento, ya que el Ejecutivo no tiene la potestad. El secretario de Bioeconomía, Fernando Vilella, y el jefe de Gabinete de la secretaría, Pedro Vigneau, participaron del encuentro.

El lobby para frenar la ley

“Hasta tanto no haya una ley que fije otro tipo de retenciones, van a seguir en cero”, confirmó el presidente de Federación Agraria, Carlos Achetoni, al salir de la reunión. Por su parte, el presidente de CRA, Carlos Castagnani, explicó que acordaron armar mesas de equipos técnicos para lograr consensuar medidas en el proyecto de ley.

Los dirigentes rurales esperan convencer al equipo de Caputo que los números no cierran por igual en las diferentes producciones. “Hay producciones que sí mejoran, en las que hay más volumen como soja o maíz, pero la lechería no resiste este 15 %”, argumentó el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino.

Durante el encuentro, que duró más de una hora, la dirigencia rural trató de explicar que a la suba de retenciones se suma el impuesto a las importaciones, el aumento de combustibles, entre otros costos. “Están mejor hoy, que ayer”, les recordó un técnico del ministerio en base a la mejora del tipo de cambio para exportar: 80 % del dólar oficial a $ 800 más el 20 % de contado con liquidación.

Un tema que se tocó fue la actividad vitivinícola. Los números de Economía reflejaban que el incremento de cero a 15 por ciento no afecta. Sin embargo, se encontraron con que el secretario de Coninagro es Marcelo Federici, presidente de la Federación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Fecovita). El dirigente mendocino empezó a cuestionar esos números y se hizo silencio.

La macro, la cuestión

Los representantes del Ministerio de Economía se concentraron en explicar la necesidad de que la macroeconomía cierre. “La cuestión fiscal es el anclaje”, dijo Caputo anoche en TN. De esta manera, las retenciones son claves para cubrir el déficit cero.

Sin embargo, el campo repite que está cansado de hacer el esfuerzo. “Me pedís vos (por el gobierno nacional), me pide la provincia, el municipio, así no se puede”, planteó un dirigente que representa a las economías regionales. Además, cuestionó que los casos que presentaron de rentabilidad de la cadena son de grandes producciones.

“Nosotros miramos productores de cítricos de 20 hectáreas”, apuntó otro dirigente que estaba enfrente de los funcionarios del gobierno. Por otra parte, el equipo técnico de Economía planteó que la suba se va a impulsar a través de un proyecto de ley. El campo ve la esperanza de que la iniciativa no consiga los votos necesarios.

“Llego a mi provincia y me reúno con ellos. Este proyecto no puede avanzar”, planteó un dirigente de la zona núcleo. Por su parte, la Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe (Carsfe) difundió un mensaje puertas adentro: “Informamos que al tener que salir por ley; cada confederada deberá contactar a sus diputados y senadores nacionales para morigerar los efectos”.  Que comience el lobby.

Agrofy