Este rincón serrano invita a recorrer las construcciones de su pequeño pueblo y a disfrutar de la naturaleza en su arroyo. El balneario comunal es una buena opción para refrescarse, y desde ahí se abren varios senderos para recorrer.
Un plan imperdible en Luyaba es pasear por la ruta de las hierbas medicinales y de las aromáticas. Se pueden apreciar los cultivos de ruda, orégano y cedrón, entre otros, recomendados por sus propiedades terapéuticas y curativas.
El camino del olivo, en tanto, incluye establecimientos olivícolas que proponen visitas guiadas gratuitas, degustaciones y productos de primera calidad. Se pueden visitar fábricas como Sierra Pura, Olivate y Finca Corralito, para conocer el proceso de elaboración.
Otro lugar para agendar es el Refugio de Vida Silvestre Los Barrancos, una reserva natural privada destinada a resguardar la riqueza de la flora y fauna del lugar, que tiene unas 1.200 hectáreas. Hay zorros, pumas, iguanas y aves, entre árboles nativos como algarrobos, quebrachos, molles y tabaquillos.
Finalmente, existen circuitos naturales en los que se pueden ver morteros, acequias y pircas, que evidencian la huella de los pueblos comechingones. Algunos recomendados son el del Arroyo, que permite refrescar los pies en el agua cristalina; el del Mirador, y el del Monte.
Luyaba está a 210 kilómetros de Córdoba capital. Se puede ir en auto por la ruta nacional 20 y por la ruta oprovincial 14. En colectivo se debe tomar un servicio hasta Villa Dolores y luego hacer trasbordo hasta el destino. (Fuente; Voy de viaje).
Diario de Carlos Paz