Quién está detrás de Agro Conceptos: agrónomo, productor e inquieto, nunca paró de aprender, tuvo una experiencia que lo marcó y creó algo único

Diego Agustín Álvarez (45) es ingeniero agrónomo y productor agropecuario, pero antes que todo eso, es un curioso por naturaleza. Nació en Buenos Aires, su padre es un empresario gastronómico reconocido por innovar con un restaurante que sirve comida en espadas, y además es un amante del campo, lo que marcó luego la vida de su hijo hacia la ruralidad. 

“Desde chico viajaba siempre a San Antonio de Areco, Carlos Casares. Todas mis fotos son arriba de un caballo. Fui creciendo y me fui animando a hacer más cosas, ordeñar, arriar las vacas. Toda mi infancia fue ahí, pero en campos de otros”, contó Diego. 

Cuando Diego tenía 7 años, la familia pudo comprar finalmente su propio campo en Nogoyá, Entre Ríos y DieSiembra directa, trading y criptos

Diego es inquieto y no paró nunca de estudiar. Su objetivo era llevar ese conocimiento de vuelta a su campo y poder sacarle todo el provecho posible: “Hice un posgrado en Siembra Directa en la FAUBA. Fue hace 20 años, cuando recién iniciaba. Siempre me interesó la tecnología y mi tesis fue sobre mapas de rendimiento. Luego hice un posgrado en Agronegocios en Agroeducación”, contó.

Además de los cursos técnicos, quiso ir por más y hace 10 años empezó a especializarse en Trading, porque considera que es importante que los productores entiendan más sobre comercialización de granos: “Lo hice online con gente de Wall Street. Luego me empecé a dedicar a análisis técnicos. Son gráficos que les ponés  parámetros y vas viendo las tendencias y determinar si comprás o vendés. Me interesó mucho porque la parte de venta de los granos tiene mucha fluctuación. Podés sacar ventaja o no depende qué decisiones tomás”. 

Hace 5 años conoció las criptomonedas y empezó a invertir: “Era algo que no se sabía mucho en ese momento. Armamos un fondo y yo seguí con el análisis técnico. Primero hicimos uno chico y luego uno más grande con inversores. La idea es diversificar la fuente de ingreso. Los productores tenemos muchas variables como el clima, uno no puede poner todo en el campo”.

go descubrió su vocación. “Mi papá no tenía idea de campo y su socio tampoco, eran hombres de ciudad. Lo tenían como lugar de fin de semana. Pasaba todos los veranos ahí, era mi diversión. Podía manejar tractores, ayudar con la agricultura, hacer un poco de caza y pesca, era mi pasión". 

La Estancia La Rosada, como la llamaron, tiene 430 hectáreas. Al principio empezaron con ganadería, compraron vacas, sembraron alfalfa, pero sin intenciones de vivir de eso, era más bien un hobbie. Cuando Diego se recibió de ingeniero agrónomo en la USAL, decidió dedicarse 100 % al campo. Empezaron con un sistema mixto con soja y actualmente se dedican solamente a la agricultura: trigo, soja y maíz. 

Siembra directa, trading y criptos

Diego es inquieto y no paró nunca de estudiar. Su objetivo era llevar ese conocimiento de vuelta a su campo y poder sacarle todo el provecho posible: “Hice un posgrado en Siembra Directa en la FAUBA. Fue hace 20 años, cuando recién iniciaba. Siempre me interesó la tecnología y mi tesis fue sobre mapas de rendimiento. Luego hice un posgrado en Agronegocios en Agroeducación”, contó.

Además de los cursos técnicos, quiso ir por más y hace 10 años empezó a especializarse en Trading, porque considera que es importante que los productores entiendan más sobre comercialización de granos: “Lo hice online con gente de Wall Street. Luego me empecé a dedicar a análisis técnicos. Son gráficos que les ponés  parámetros y vas viendo las tendencias y determinar si comprás o vendés. Me interesó mucho porque la parte de venta de los granos tiene mucha fluctuación. Podés sacar ventaja o no depende qué decisiones tomás”. 

Hace 5 años conoció las criptomonedas y empezó a invertir: “Era algo que no se sabía mucho en ese momento. Armamos un fondo y yo seguí con el análisis técnico. Primero hicimos uno chico y luego uno más grande con inversores. La idea es diversificar la fuente de ingreso. Los productores tenemos muchas variables como el clima, uno no puede poner todo en el campo”.

Agro Conceptos y el inicio de una comunidad

Toda esta formación la fue combinando con algo clave: los contactos. El afán de Diego por aprovechar los canales de comunicación digitales lo llevó a relacionarse con agrónomos de EEUU y Canadá, para poder conocer y aprender sobre tendencias y tecnología: ”Muchos tienen podcasts, les escribo y me responden el mismo día. Es impresionante lo que las redes permiten hacer hoy”.

Los datos que fue adquiriendo de las conversaciones quiso ponerlos a disposición de toda la comunidad del agro. Ahí fue que se le ocurrió crear la cuenta “Agro Conceptos”, que hoy en día sumando Instagram y X se acercan a los 20k seguidores, casi todos del ambiente del campo. 

“La cuenta surgió el año pasado. La mayoría de mis seguidores son productores y agrónomos, de 35 años aproximadamente. Veía que había muchos productos biológicos nuevos y lo que me resultaba raro es que le preguntabas al que te lo vendía y no tenía mucha información. Empecé a probarlos, los compartí en las redes y noté enseguida que los colegas estaban en la misma situación que yo, eso me motivó a investigar y empezar a compartir lo que aprendía”, contó el agrónomo. 

Otro de los motivos que lo llevó a crear Agro Conceptos surgió de una experiencia con la Facultad de Agronomía de Nogoyá: “A mitad del año pasado me contacté con ellos para hacer algo juntos.  Estoy en el campo hace 35 años, conozco toda esa zona. Les gustó la propuesta porque los estudiantes no tienen dónde hacer sus prácticas, se desmotivan. Me re copé y empecé a buscar cosas que les pudiera servir. Les conseguí que FieldView les dé un demo gratis para todos. También One Soil ofreció darles cuentas gratis. Sin embargo la burocracia no me permitió avanzar y finalmente decidí empezar a compartiro en las redes sociales así pueden acceder directamente”. 

Diego contó que cuando empezó a involucrarse en las redes veía que en, por entonces, Twitter, no encontraba el contenido que buscaba, la mayoría de los que interactuaban lo hacían sobre política y agro, no temas técnicos: “Los públicos de Instagram y X son muy distintos. En X hay mucha más interacción, buscan más información, por eso siempre trato de bajar cosas que aún no llegaron a Argentina, como lo de Strip Till, que combina siembra directa y convencional, es lo que se viene”.

Su idea inicial era ir relatando en redes cómo es en vida propia armar una campaña; cómo se compran los insumos, las rotaciones, pero al final decidió publicar sobre cada problema que ve en el campo. “Esta semana hice un posteo de cómo mejorar la sanidad vegetal. También hablé de granizo, hice un post donde podías meterte con gráficos y ver según el estadío de la soja o maíz y el daño que tenía, estimar pérdidas para tomar decisiones. Son cosas prácticas que al que está en el campo le puede servir”. 

La cuenta además tiene muchas publicaciones con tips que brindan colegas y profesionales del sector que van desde cuestiones técnicas como control de plagas, mantenimiento de maquinaria, pulverización eficiente, agricultura de precisión, hasta temas relacionados al trading, mercado de granos, y seguridad informática.

“Estoy subiendo muchos formatos de colaboración. Temas que yo no manejo tanto, llamo a colegas y les pido que participen. El haber estudiado cosas tan diversas me hizo relacionarme con mucha gente durante estos años. A algunos los nombro, otros lo hacen desde el anonimato”, explicó el agrónomo. 

Diego realiza ensayos para empresas en su campo, actualmente trabaja con Bayer, Syngenta, Stoller, Rizobacter, Fertilizar y Don Mario: “Me dan los productos y los pruebo. Me relaciono con los mejores de cada rubro y aprendo muchísimo en el proceso”.

Si bien sus cuentas siguen creciendo, el agrónomo sostiene que su intención a futuro no es ser “influencer” o vivir de las redes: “Lo mío es crear contenido con información, generar feedback, conocer gente de todo el mundo”. 

Y agregó: “Hay que hacer preguntas, la mejor forma de aprender es preguntar. Hay que aprovechar las redes que te permiten acceder a todo el mundo. Mi objetivo es crear un podcast para compartir más información. Todo lo que aprendí es a través de podcast, nosotros que viajamos mucho es una herramienta muy valiosa”. 

Su familia, sus hobbies y los proyectos

Diego se casó hace 10 años y se fue a vivir a Tigre. Tiene dos hijos, de 9 y 6: “El varón es fanático del campo, de los tractores. No quiero sesgar el pensamiento para que sea agrónomo, que elija lo que le haga feliz”, expresó.

En su tiempo libre juega al tenis, corre y le gusta el wakeboard. Por ahora no piensa en involucrarse en política. Pero hace unos años consiguió el celular de Javier Milei y se animó a escribirle un mensaje para contarle sobre nuevas tendencias en el agro, aunque nunca le respondió: “El tema político es delicado, sobre todo después de lo que pasó con la 125 y el campo. La gente tiene miedo de enfrentarse de nuevo con la ciudad. Solo me sumaría a un organismo como la Secretaría de Agricultura para colaborar en la parte técnica”. 

Diego expresa que es muy desafiante ser productor agropecuario en Argentina: “El campo en Argentina es bastante sacrificado, no sólo por el clima sino por la presión impositiva. Es muy complejo, más que en cualquier parte del mundo”.

Aún con toda esas adversidades ve que cada vez más gente, de otros rubros, se empieza a interesar por el campo: “Muchos me escriben y me dicen que les gustaría hacer negocios o terminar sus carreras en el campo, tener una vida distinta”. 

Por último, el agrónomo sostiene que le parece fundamental que las nuevas generaciones incorporen tecnología al campo: “Ellos nacieron con el teléfono, tienen muchísima más información que nosotros hace 20 años. Lo que se viene ahora son sensores remotos, drones, hay que saber manejarlos bien. La mayoría que toma decisiones importantes todavía es de una generación anterior, pero eso va a cambiar”. 

Agrofy