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La reciente firma del acuerdo bilateral entre Argentina y Brasil marca un hito significativo en la historia de la aviación de ambos países. Esta medida, impulsada por la Cancillería y la Secretaría de Transporte, en colaboración con la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), representa un cambio trascendental en la política aérea internacional, especialmente en un contexto marcado por la búsqueda de una mayor apertura y liberalización del mercado.
Anteriormente, los límites en la cantidad de vuelos entre Argentina y Brasil imponían restricciones a las aerolíneas, limitando su capacidad para satisfacer la demanda y competir de manera efectiva en el mercado. Sin embargo, con la abolición de estos límites, se abre un nuevo panorama para el sector aéreo, donde las compañías tienen la libertad de determinar la cantidad de vuelos de pasajeros y carga que deseen operar entre ambos países.
El acuerdo, respaldado por un memorando de entendimiento que ya está en vigor, establece un compromiso mutuo de no imponer restricciones unilateralmente en cuanto al volumen de tráfico, las frecuencias, la regularidad del servicio o el tipo de aeronaves utilizadas. Esta disposición proporciona un marco de certidumbre y estabilidad para las aerolíneas, lo que les permite planificar a largo plazo y tomar decisiones estratégicas con mayor confianza.
El objetivo principal del Gobierno Nacional al impulsar esta medida es promover la flexibilidad operativa de las aerolíneas, lo que se traduce en un aumento de la oferta de servicios y una mayor competencia en las rutas que conectan a Brasil y Argentina. Esta mayor competencia no solo beneficia a los pasajeros, quienes pueden disfrutar de una mayor variedad de opciones y precios más competitivos, sino que también tiene un impacto positivo en el mercado laboral, generando tanto empleos directos como indirectos en el sector aéreo y sus industrias auxiliares.
En resumen, este acuerdo bilateral representa un paso significativo hacia una mayor integración y desarrollo del sector aéreo entre Argentina y Brasil, al tiempo que refleja el compromiso del gobierno con la promoción del libre mercado y la generación de oportunidades económicas para sus ciudadanos.
