Por Agroempresario.com
Las empresas nacionales que se dedican a la fabricación de maquinaria agrícola enfrentan una situación crítica debido a una desaceleración en las ventas. Enrique Rubén Bertini, presidente de la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (Cafma), ha hecho un llamado urgente al Gobierno para que implemente políticas industriales que impulsen la producción nacional y brinden apoyo a estas empresas.
Bertini ha destacado la necesidad de que la Secretaría de Industria reconozca y respalde a la industria nacional, colaborando en la creación de políticas que fomenten su desarrollo. El sector ha experimentado una caída constante en la actividad de producción durante al menos un año, con reducciones en las horas laborales y la no renovación de contratos temporales en varias compañías.
Un informe elaborado por la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Adimra) ha revelado que el sector de la maquinaria agrícola ha experimentado una disminución del 15,2% en abril último y del 66,9% en lo que va del año, en comparación con el mismo período de 2023.
La situación se agrava con una escasa rentabilidad para los productores agropecuarios, lo que se traduce en pocas ventas y una comercialización difícil para las empresas de maquinaria agrícola. Además, la economía estancada y la incertidumbre en torno al financiamiento y las tasas de interés han contribuido a esta situación.
La encuesta realizada por la cámara a sus socios ha revelado números negativos sobre las operaciones, con más del 25% de los empresarios informando que sus ventas representaban el 50% o menos de lo habitual. Ante esta situación, Bertini y otros representantes del sector han mantenido varias reuniones con funcionarios del Gobierno, instando a la implementación de medidas que impulsen la actividad industrial nacional.
Entre las propuestas planteadas se encuentra la posibilidad de otorgar bonos para la compra de maquinaria, contabilizando las retenciones. Se busca aliviar la carga impositiva tanto para las empresas como para los productores agropecuarios, incentivando así la adquisición de productos nacionales.
Bertini también ha alertado sobre la "descapitalización" que están sufriendo las empresas debido al exceso de inventario no vendido, lo que genera pérdidas y capital inmovilizado. Esta situación ha llevado a la reducción de horas de trabajo en las fábricas y la necesidad de buscar alternativas para mantener la estabilidad económica del sector.
En última instancia, Bertini subraya la importancia de reconocer a la industria nacional como un pilar fundamental para el desarrollo económico y la generación de empleo en el país, y se compromete a seguir trabajando con las autoridades para encontrar soluciones que impulsen la recuperación del sector.