Por Agroempresario.com
Argentina está avanzando en el ámbito digital con el reciente Decreto 640/24, que desregula el mercado de warrants y certificados de depósito. Esta nueva normativa abre un rango de posibilidades para la tokenización de productos, incluyendo soja, litio y petróleo, transformando cómo estos activos pueden ser utilizados en los mercados financieros.
Bajo el decreto, las empresas ahora pueden emitir sus propios warrants o certificados, sin necesidad de recurrir a los emisores previamente autorizados. Esta innovación permite la creación de tokens digitales que representan activos físicos, facilitando transacciones más sencillas y un acceso más amplio al mercado.
La tokenización se refiere a la representación digital de activos físicos, permitiendo su comercio e inversión como si fueran monedas virtuales. Este proceso tiene varias ventajas:
Santiago Catani, abogado especializado en fintech y CEO de Zorya, explica que el decreto busca replicar el sistema de cheques y pagarés electrónicos, garantizando la unicidad de los títulos digitales. Este nuevo sistema promete una mayor velocidad, transparencia y adaptabilidad al panorama financiero en evolución.
Ismael Caram, Head of Crypto & Digital Assets en Matba Rofex, destaca que el decreto no solo permite a los emisores existentes, sino también a nuevas empresas crear y autoemitir warrants. Esta flexibilidad abarca varios sectores, incluyendo agricultura, ganadería, silvicultura, minería y energía. Por ejemplo, Agrotoken, una startup local, ya está liderando el camino al tokenizar soja, maíz y trigo en Argentina, Brasil y Uruguay.
Matba Rofex también está trabajando en un proyecto para digitalizar granos, permitiendo a los productores utilizar sus granos almacenados como garantía en los mercados de futuros a través de la tokenización. Esta innovación podría proporcionar un importante apalancamiento financiero y agilizar las transacciones en el mercado.
Se espera que la tokenización de productos agrícolas y recursos naturales desbloquee un mercado de $120 mil millones anuales. Esta nueva normativa no solo simplifica la emisión y comercio de estos activos digitales, sino que también abre oportunidades de inversión global. Federico Sturzenegger, Ministro de Modernización, afirma que la tokenización revitalizará la actividad económica al facilitar préstamos del sector privado y mejorar la valoración de los activos.
Nicolás Verderosa, emprendedor cripto, señala que este desarrollo mejora el acceso a mercados globales, permitiendo a los productores atraer inversores de todo el mundo, mientras se reducen costos y tiempos de transacción. Los pequeños inversores también se beneficiarán, accediendo a productos básicos sin las barreras tradicionales del mercado bursátil.
El potencial para crear stablecoins respaldadas por productos o manufacturas representa una nueva avenida de inversión, ofreciendo estabilidad y liquidez atadas a los activos subyacentes. Caram visualiza un futuro donde los tokens que representan granos físicos pueden ser negociados, permitiendo a los fondos de inversión evitar los contratos futuros y ahorrar en costos asociados.
El avance de Argentina hacia la tokenización representa un avance significativo en cómo se gestionan y financian los productos agrícolas y recursos naturales. Este enfoque innovador promete mejorar la eficiencia del mercado, ampliar las oportunidades de inversión y apoyar el crecimiento de los sectores financiero y agrícola.