Por Agroempresario.com
En el contexto de un mercado agrícola cada vez más influenciado por las nuevas tecnologías, un equipo de investigación del INTA presentó una innovadora aplicación que busca prevenir el cancro del tallo en girasol, enfermedad provocada por el hongo Diaporthe helianthi. Esta herramienta, que es de libre acceso y gratuita, fue diseñada para ayudar a productores, empresas y asesores técnicos a tomar decisiones en tiempo real y así minimizar las pérdidas en sus cultivos.
La aplicación predice las condiciones climáticas que favorecen la liberación de esporas del hongo, lo que permite anticipar el momento óptimo para aplicar tratamientos preventivos, como los fungicidas. Esto resulta fundamental, ya que el uso de fungicidas es más efectivo antes de que la enfermedad sea visible en el campo.
El cancro del tallo de girasol es una de las enfermedades más devastadoras para este cultivo, con pérdidas que pueden reducir el peso de los aquenios en hasta un 46% y disminuir el nivel de aceite hasta un 15%. La enfermedad se manifiesta inicialmente como una lesión necrótica en la base de las hojas, que luego avanza hacia la médula del tallo, debilitando la planta y, en casos graves, provocando el quiebre del girasol antes de la cosecha.
Ricardo Moschini, uno de los desarrolladores del modelo predictivo, explicó que la aplicación está basada en más de 30 años de datos meteorológicos y fitopatológicos recogidos en ensayos de campo. "El modelo permite monitorear el riesgo en diferentes zonas a lo largo del ciclo del cultivo, brindando información clave para la toma de decisiones", señaló.
La aplicación toma datos meteorológicos diarios, como temperatura, humedad y precipitaciones, de estaciones del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y del INTA para calcular la probabilidad de liberación de esporas. Esto permite a los productores seguir la evolución del riesgo de infección desde la siembra hasta los 120 días de desarrollo del cultivo.
"El riesgo de infección es más alto en el sudeste de la región pampeana, donde históricamente se han observado mayores niveles de la enfermedad", comentó Malvina Martínez, investigadora del Instituto de Clima y Agua del INTA. Martínez añadió que la etapa más crítica para las infecciones es el estado de estrella, cuando las condiciones climáticas son más favorables para la liberación de esporas.
Además de ayudar a los productores a decidir cuándo aplicar fungicidas, el modelo predictivo ofrece importantes ventajas para los fitomejoradores de girasol. Al identificar las zonas con mayor riesgo de infección, los investigadores pueden priorizar sus ensayos en estos lugares, acelerando la selección de híbridos con mayor resistencia a la enfermedad.
Por otro lado, al tratarse de una herramienta en línea, accesible desde cualquier dispositivo con conexión a internet, esta aplicación democratiza el acceso a la tecnología, permitiendo que productores de diferentes tamaños puedan implementar medidas preventivas de manera más eficiente y económica.
Este desarrollo del INTA, en colaboración con investigadores de INIA La Estanzuela en Uruguay, es un ejemplo claro de cómo la tecnología está transformando el manejo de cultivos en Argentina. El uso de herramientas predictivas no solo mejora la eficiencia de las prácticas agrícolas, sino que también promueve un uso más sostenible de los insumos, reduciendo la necesidad de aplicar tratamientos químicos de manera indiscriminada.
Sergio González, del Instituto de Agrobiotecnología y Biología Molecular (IABIMO INTA-Conicet), quien lideró la inclusión del modelo en el sitio web del INTA, destacó la importancia de esta herramienta en la lucha contra el cancro del tallo: "Nuestro objetivo es proporcionar una herramienta confiable y accesible que permita a los productores reducir las pérdidas y mejorar la rentabilidad de sus cultivos".
Con este nuevo avance, el sector girasolero argentino tiene en sus manos una herramienta poderosa para enfrentar una de las enfermedades más dañinas de este cultivo. La aplicación no solo optimiza el uso de fungicidas, sino que también promueve una agricultura más precisa y sustentable.