Roberto Nardelli, presidente de la Cámara de Exportadores de Carbón Vegetal del Chaco, brindó en declaraciones al programa Agroperfiles Radio una visión crítica sobre los desafíos que enfrenta el sector productivo, destacando problemas como los altos impuestos, los costos elevados de los insumos y la falta de apoyo gubernamental efectivo.
También mencionó la desconexión entre los políticos y las realidades del interior del país, así como la necesidad de un cambio urgente en las políticas para evitar la pérdida de más inversores y capital humano.
El presidente de la Cámara de Exportadores de Carbón Vegetal del Chaco, compartió su análisis sombrío sobre la situación actual del sector. Describió un panorama desolador para los productores de carbón vegetal en la región.
En este sentido dijo que, en los últimos meses, los costos de producción se han disparado mientras que los precios de los productos han permanecido bajos, o incluso han disminuido. “El combustible es tres veces más caro, los insumos han subido de precio, pero el producto sigue teniendo el mismo valor o está más barato”, explicó Nardelli.
Y agregó que esta disparidad llevó a muchos pequeños y medianos productores a un callejón sin salida.
Todos los costos aumentaron
Un ejemplo concreto es el aumento en el precio de los repuestos y herramientas esenciales para la producción. “Una manguera hidráulica cuesta cuatro veces más de lo que costaba el año pasado, y el producto que necesitas vender para reponer esa manguera vale menos hoy”, ilustró. Ante esta realidad, explicó que la viabilidad económica del sector se ve seriamente comprometida. “Los productores, sin margen de ganancia suficiente para cubrir los crecientes costos, comienzan a desaparecer del mercado” alertó.
Falta de políticas claras y la ausencia del Estado
Uno de los puntos que más preocupa a Nardelli es la falta de políticas claras y el desinterés del gobierno, tanto a nivel provincial como nacional, para abordar los problemas estructurales del sector. Según sus palabras, “no hay reglas claras que guíen a los productores, y las trabas burocráticas hacen imposible cualquier avance significativo”.
“Seguimos desbordados de impuestos, y todo lo que se ha hablado sobre reducir la carga impositiva no se ha cumplido”, aseguró el presidente de la Cámara de Exportadores de Carbón Vegetal del Chaco.
El productor chaqueño también denunció la falta de acciones concretas por parte de los políticos, quienes, según él, no están en contacto con la realidad del campo ni con las dificultades que enfrentan quienes trabajan la tierra. “No veo a los políticos por el interior entendiendo la problemática de los productores y llevando esa problemática a las cámaras para hacer planteos reales”, criticó con dureza.
Además, apuntó que esta desconexión con la realidad del interior del país ha generado un éxodo masivo de jóvenes, quienes ven más oportunidades fuera de Argentina que en su propio territorio. “Los hijos se terminan yendo, buscan otros lugares y son exitosos en cualquier lado”, lamentó. Y aseguró que “este fenómeno de emigración no solo debilita a las comunidades locales, sino que también priva al país de capital humano valioso”.
El futuro incierto del carbón vegetal y la economía regional
La situación del comercio del carbón vegetal es igualmente desalentadora. Según Nardelli, el mercado interno “está totalmente colapsado, y los productos como el carbón, el tanino y la leña no tienen valor de mercado”.
“Aunque lo quieras vender barato, no hay punto de venta. Está todo colapsado”, afirmó. Y remarcó que “las fábricas y exportadores se ven incapaces de aumentar los precios debido a las reglas de juego inalteradas y un dólar depreciado, lo que agrava aún más la situación”.
Por ello, consideró que “este colapso no solo afecta a los productores, sino que también pone en jaque a todo el sector económico del Chaco, donde el carbón vegetal es una de las principales fuentes de ingreso”.
A ello, se suman las tasas de interés bancarias elevadas, la inflación descontrolada y la falta de incentivos para la producción hacen que muchos productores consideren cerrar sus negocios. “Nosotros estamos tratando de sostenernos, pero si esto sigue así, a fin de año o principios del próximo cerramos” advirtió, y expresó su desesperanza frente al futuro incierto.
Sobre ello, consideró que “las cifras hablan por sí mismas. Mientras los costos de producción se han triplicado en algunos casos, los ingresos por ventas han caído drásticamente. La falta de inversión, tanto pública como privada, y la ausencia de gestos por parte del gobierno para aliviar la situación hacen que la viabilidad de la producción de carbón vegetal en el Chaco sea cada vez más dudosa”.
Llamado urgente a la acción
Por último, alertó que la situación de los productores de carbón vegetal en el Chaco refleja un problema más amplio que afecta a todo el sector productivo en Argentina. “Sin señales claras ni políticas que promuevan la inversión y alivien la carga impositiva, la crisis actual podría continuar profundizándose” remarcó, al tiempo que hizo un llamado “a los políticos a que escuchen a quienes trabajan la tierra y tomen medidas concretas. Lo que pedimos es un poco de cordura. Miremos al pueblo y veamos lo que hace falta”, concluyó con un mensaje claro.
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