Por Agroempresario.com
En la provincia de Santa Cruz, la superpoblación de guanacos ha alcanzado niveles preocupantes, generando una intensa competencia con la tradicional ganadería ovina de la región. Según estimaciones de entidades agropecuarias, mientras la población ovina ronda los 2,3 millones de cabezas, los guanacos ya superan los 3 millones, una cifra alarmante que está afectando directamente a los productores locales.

Este problema fue uno de los principales temas tratados en una reciente reunión entre dirigentes ruralistas patagónicos y el secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, donde se buscó trazar una estrategia para mitigar los efectos de este fenómeno y preservar la producción ganadera. Durante el encuentro, los representantes destacaron la necesidad de establecer un manejo más eficaz de la población de guanacos, una especie silvestre cuya presencia está perjudicando los pastizales naturales, escasos en la meseta patagónica.

Un problema fuera de control

César Guatti, de la Federación de Instituciones Agropecuarias de Santa Cruz (FIAS), expresó que la situación es crítica debido a la elevada tasa reproductiva de los guanacos. “Hace más de 20 años que este animal comenzó a ser un problema para los productores, y en los últimos inviernos, más benignos, la población ha crecido exponencialmente", comentó Guatti. A pesar de los esfuerzos para regular su extracción, las medidas adoptadas hasta ahora no han sido suficientes.

Impacto en el ecosistema y la producción

El guanaco, una especie protegida, compite directamente con las ovejas por el acceso a los recursos naturales, como el agua y el forraje, lo que agrava la situación de un ecosistema frágil como el de la Patagonia. Según los expertos, el puma, su depredador natural, no puede equilibrar el crecimiento poblacional de los guanacos, que continúa en aumento.

Además del impacto sobre los pastizales, los productores también enfrentan las secuelas de las nevadas recientes, que afectaron los rodeos ovinos. Gracias a la rápida declaración de la emergencia y la acción coordinada de los gobiernos provincial y nacional, se pudo distribuir alimento balanceado para evitar pérdidas masivas en la majada.

Una solución en proceso

Durante la reunión, Iraeta reiteró el compromiso del Gobierno Nacional con el Plan de Manejo del Guanaco, el cual ha sido reformado recientemente para otorgar más poder a las provincias patagónicas en la gestión de esta problemática. No obstante, las entidades rurales subrayaron la necesidad de avanzar con mayor celeridad en la implementación de medidas concretas que ayuden a mitigar la superpoblación y proteger a los productores ovinos.

El secretario de Agricultura también se comprometió a convocar una mesa de trabajo patagónica para el próximo mes, con el objetivo de dar seguimiento a los temas discutidos. Entre ellos, además del manejo del guanaco, se abordarán otras preocupaciones como las líneas de crédito, la barrera sanitaria y las compensaciones salariales.

La superpoblación de guanacos en Santa Cruz representa un desafío urgente para la ganadería ovina, una de las principales actividades económicas de la región. Con la mesa de trabajo propuesta, se espera avanzar en soluciones efectivas que permitan un manejo más sostenible de esta especie y la protección del sector agropecuario patagónico.