Por Agroempresario.com
En un reciente informe, el banco de inversión estadounidense JP Morgan ha generado un clima de optimismo en el ámbito económico argentino, anticipando que, de mantenerse el plan del nuevo presidente Javier Milei, la inflación promedio mensual para 2025 podría situarse en torno al 2%, lo que llevaría a una tasa anual del 35% hacia diciembre de ese año. Este análisis sugiere que la implementación de un "programa de estabilización" junto con una "unificación del mercado cambiario" serían cruciales para lograr una desaceleración inflacionaria significativa.
La entidad financiera subraya que el éxito de estas proyecciones dependerá en gran medida de la agilidad con que se lleven a cabo reformas estructurales y se eliminen los controles de capital, ya que cualquier demora podría afectar la actividad económica y exacerbar la brecha cambiaria. Además, se advierte sobre el aumento de presiones inflacionarias que podrían surgir en el contexto de las elecciones legislativas de octubre de 2025.
JP Morgan también presenta sus pronósticos para finales de 2024, donde estima una inflación promedio del 3,7% en el último trimestre del año. Este leve repunte se atribuye, en parte, a la "unificación del mercado cambiario", lo que podría provocar un aumento temporal en los precios antes de que las políticas de Milei empiecen a mostrar resultados.
Por otro lado, el economista Ramiro Castiñeira, director de la Consultora Econométrica, respalda esta perspectiva optimista. En declaraciones recientes, Castiñeira destacó que, con las políticas monetarias implementadas en 2024, es posible que la inflación en octubre se sitúe en un 3% o menos. Según él, la contención del déficit fiscal y la reducción de la emisión monetaria son clave para esta estabilización. Castiñeira va más allá al afirmar que, si esta tendencia se mantiene, "la inflación podría llegar a desaparecer".
A medida que se aproximan los tiempos de cambio, el sector privado proyecta una inflación anual del 40% para el próximo año, mientras que datos oficiales sugieren un panorama más optimista, con una estimación del 20%. En este contexto, el enfoque de Milei y las estrategias monetarias que implemente serán determinantes para el futuro económico de Argentina y su capacidad para atraer inversiones.
Con un clima de incertidumbre en el horizonte, tanto los ciudadanos como los inversores estarán atentos a las decisiones que se tomen en los próximos meses, buscando señales que respalden estas proyecciones y aseguren un camino hacia la estabilidad económica.