Por Agroempresario.com
Los datos económicos más recientes reflejan un panorama diverso para Argentina en el cierre de 2024. Según las cifras de octubre, la actividad industrial mostró leves mejoras interanuales, pero el ritmo de recuperación sigue siendo lento y desigual entre sectores, marcando un desafío para el crecimiento proyectado en 2025.
El desempeño económico en octubre es clave para establecer el "arrastre estadístico" que influirá en los números del próximo año. Según el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) del Indec, la economía registró en septiembre una caída de 0,3% respecto a agosto, interrumpiendo dos meses consecutivos de mejora. Sin embargo, para octubre, consultoras como Equilibra anticipan un crecimiento mensual de 0,5%, aunque con una contracción interanual de 1%.
En tanto, el Indicador General de la Actividad elaborado por Orlando J. Ferreres identificó una leve mejora mensual del 0,2%, pero acumuló un retroceso del 4,7% en los primeros diez meses del año. Estos datos muestran un panorama de recuperación lenta, donde sectores como la refinación de petróleo, la producción automotriz y de alimentos y bebidas lideran el crecimiento, mientras otros aún enfrentan caídas.
De acuerdo con la Fundación FIEL, la actividad industrial en octubre igualó los niveles del año anterior. Sin embargo, esta recuperación parcial se desarrolla en un contexto de demanda interna débil y con dinamismo limitado en comparación con repuntes anteriores. La Unión Industrial Argentina (UIA) coincidió al señalar una leve mejora en septiembre y octubre, pero advirtió que los niveles de consumo todavía no reflejan una reactivación sólida debido a la lenta recomposición salarial.
El empleo también ofrece señales mixtas. Según datos de agosto, tras once meses de caídas consecutivas, se observó una ligera mejora en el mercado laboral. No obstante, algunos sectores aún presentan caídas, aunque más moderadas que en períodos anteriores.
El Gobierno proyecta un crecimiento económico del 5% para 2025, mientras que las estimaciones privadas son más conservadoras, con un pronóstico de 3,6%. Según analistas, el "piso" de crecimiento ya asegurado por la recuperación reciente ronda el 2%. Este arrastre estadístico resulta de una mejora acumulada del PBI de 3,4% en el tercer trimestre, con un crecimiento de 4% desde el mínimo registrado en abril.
Consultoras como LCG advierten que, aunque los indicadores recientes muestran señales positivas, el consumo sigue siendo insuficiente para consolidar una recuperación robusta. Los salarios reales, que comenzaron a mejorar desde marzo, aún no logran reactivar plenamente la demanda interna.
El cierre de 2024 será determinante para establecer un punto de partida sólido en 2025. Si bien sectores clave de la industria están en recuperación, la economía enfrenta desafíos estructurales que limitan un crecimiento más amplio. El próximo año dependerá en gran medida de consolidar las mejoras actuales y de avanzar en políticas que impulsen la productividad y el consumo.
Con este escenario, los municipios productivos tendrán un rol esencial en fomentar el desarrollo económico local, impulsando inversiones y fortaleciendo la cadena de valor en sectores estratégicos.