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Por Agroempresario.com
En el marco de la Tercera Temporada del Ciclo Audiovisual “Comunicándonos en Agroempresario.com”, recibimos a Daniel Salamone, Presidente del CONICET, en una entrevista exclusiva con Fernando Vilella, Director de Desarrollo Estratégico y Contenidos de Agroempresario.com. Durante el dialogo Salamone profundizó sobre el potencial de Argentina como líder en innovación biotecnológica, subrayando la necesidad de inversiones sostenidas en educación y ciencia.
Salamone abrió la entrevista destacando el rol estratégico de la biotecnología en la agroindustria:
"Argentina tiene una enorme capacidad en biotecnología, pero para ser líderes globales debemos mejorar nuestras políticas de inversión en ciencia y educación", afirmó.
Actualmente, el país se posiciona como uno de los principales exportadores de productos agrícolas con alto valor agregado. Sin embargo, según Salamone, el salto cualitativo hacia la innovación depende de consolidar equipos interdisciplinarios, mejorar la infraestructura científica y garantizar la estabilidad del financiamiento público y privado.
Desde su posición como presidente del CONICET, Salamone explicó los esfuerzos para conectar la investigación científica con las necesidades de la agroindustria.
"El CONICET trabaja constantemente para transferir tecnologías a los sectores productivos. Esto no solo genera competitividad, sino también empleos de alta calidad", detalló.
Entre los proyectos más recientes, destacó los avances en edición genética de cultivos y el desarrollo de microorganismos que optimizan la fertilidad de los suelos, tecnologías que ya están siendo transferidas a cooperativas agrícolas y grandes productores.
Salamone insistió en que la base del desarrollo tecnológico radica en la formación de talento:
"No podemos hablar de biotecnología avanzada si no formamos investigadores y técnicos capacitados desde el nivel secundario hasta el doctorado", expresó.
Para ello, llamó a consolidar programas de becas, financiamiento de proyectos estudiantiles y la creación de más centros regionales de investigación aplicada.
Un punto clave fue la necesidad de articular la academia con el sector privado, permitiendo que estudiantes y científicos encuentren oportunidades laborales directamente vinculadas a la industria.
Durante la charla, Vilella y Salamone analizaron las tendencias globales en biotecnología. Salamone destacó que Argentina tiene el potencial para exportar tanto productos como conocimientos:
"Hay una demanda creciente de soluciones biotecnológicas a nivel mundial. Si logramos posicionarnos como proveedores de tecnología, el impacto económico será extraordinario".
En este sentido, destacó casos de éxito como el de empresas argentinas que lideran en semillas transgénicas y bioinsumos, las cuales ya exportan a mercados clave como Brasil, Estados Unidos y Europa.
A pesar de las oportunidades, Salamone también subrayó los desafíos que enfrenta el sector. Entre ellos, mencionó:
"Si queremos cambiar estas realidades, debemos trabajar juntos: el gobierno, las empresas, los científicos y la sociedad en su conjunto", señaló Salamone.
Otro tema central de la entrevista fue la necesidad de alianzas público-privadas. Salamone destacó ejemplos exitosos donde empresas colaboraron con el CONICET para desarrollar soluciones a medida, como la creación de biofertilizantes adaptados a zonas áridas o el diseño de nuevas variedades de soja resistentes a plagas y sequías.
Estas sinergias no solo mejoran la competitividad de la agroindustria, sino que también impulsan la sostenibilidad, un valor cada vez más demandado por los mercados internacionales.
La entrevista cerró con un mensaje contundente de Salamone:
"Tenemos una oportunidad histórica de transformar la agroindustria argentina a través de la biotecnología. Pero para lograrlo, debemos comprometernos a invertir, educar y trabajar unidos".
Con estas palabras, el presidente del CONICET dejó clara la necesidad de un esfuerzo colectivo para que Argentina se consolide como un referente global en innovación tecnológica y desarrollo sostenible.
