Por Agroempresario.com
En febrero comenzó la "Ruta del Agua de Alta Montaña", una propuesta itinerante organizada por Eco de los Andes, que recorre algunas de las regiones más destacadas de Argentina: la Costa Atlántica, la Patagonia, Buenos Aires y Mendoza. Esta experiencia única está diseñada para poner en valor la pureza y frescura del agua que nace a más de 5.000 metros de altura en la Cordillera de los Andes, a través de una serie de eventos gastronómicos que combinan los mejores ingredientes regionales y platos de autor.
La iniciativa reúne a chefs renombrados de cada zona, quienes presentan menús exclusivos que buscan armonizar la gastronomía local con agua de alta montaña y vinos de especialidad. La propuesta permite a los asistentes disfrutar de la alta cocina en un contexto natural, donde el agua de calidad potencia los sabores de los platos y realza la experiencia sensorial.
La Ruta del Agua de Alta Montaña tiene como objetivo ofrecer a los asistentes una experiencia de inmersión en la cultura y los sabores de cada región, destacando cómo el agua de alta montaña puede potenciar los ingredientes y maridar perfectamente con los vinos locales. Según Carolina Santillan, gerente de Marketing e Innovación de Eco Aguas y Bebidas Saludables, “La Ruta del Agua de Alta Montaña propone ofrecer a los asistentes la posibilidad de conectar la mejor gastronomía regional con un agua de calidad que enaltece la experiencia”.
Desde hace más de dos décadas, Eco de los Andes ha sido reconocida por la Escuela Argentina de Sommeliers como el agua ideal para maridar con la alta gastronomía. Su origen, filtrado de forma natural por las rocas de la montaña, le otorga una pureza y un balance mineral perfectos para realzar los sabores y armonizar con los platos más sofisticados.
La experiencia comenzó en la Costa Atlántica, donde chefs destacados como Juani Kittlein dieron inicio a este recorrido gastronómico. En los restaurantes Socarrat Miramar y Socarrat Al Mar, los asistentes pudieron disfrutar de un arroz en paella de montaña con arroz de cordero patagónico, vino Malbec y remolachas al rescoldo. En Pinamar, el restaurante Olivo ofreció un risotto elaborado por Dante Liporace, con arroz italiano, quesos de la casa, panceta, tinta de calamar y langostinos Thai, mientras que en Mar del Plata, Corte y Confección presentó un lenguado con alcaparras y polvo de aceitunas.
Por su parte, en Chapadmalal, Casa Yagua ofreció un cordero braseado con puré de coliflor y salsa de vino tinto, en un claro homenaje a los sabores tradicionales de la región costera. Además, Albufera, en Mar Chiquita, sorprendió con una paella de mar y montaña acompañada de alioli de ajos ahumados y curry salvaje.
La segunda semana de febrero llevó la Ruta del Agua de Alta Montaña a la Patagonia, un lugar conocido por su rica biodiversidad y productos autóctonos de gran calidad. En Bariloche, el restaurante Brazarte presentó un plato destacado: trucha con pesto de tomates secos, ajos dulces, vegetales de estación y espuma de yemas ahumadas. Este plato representó la perfecta armonización entre la pureza del agua de montaña y los sabores intensos de la región patagónica.
En la provincia de Neuquén, la ruta continuó su recorrido con un paso por Saurus, el restaurante de la Bodega Schroeder, en San Patricio del Chañar. Los chefs locales resaltaron la conexión entre el agua pura y los productos típicos como la trucha, el cordero y los quesos, tan representativos de la gastronomía patagónica.
En la tercera semana de febrero, la Ruta del Agua de Alta Montaña llegó a la ciudad de Buenos Aires, donde chefs como Emanuel Álvarez, de Ajo Negro, presentaron un menú con navajas patagónicas cocidas en parrilla de quebracho con gremolata de almendras. Otros restaurantes de la ciudad también participaron de la experiencia, incluyendo Raix, Fico y Farid, que ofrecieron propuestas con ingredientes regionales y un fuerte enfoque en la relación entre el agua pura de montaña y los productos locales.
En Raix, los asistentes pudieron degustar un gazpacho de tomates reliquia con pangrattato y empanadas de cordero braseado al horno de leña con salsa de tomates mendocinos, mientras que en Fico se sirvieron mollejas a las brasas con choclo y crema de verdeo, que resaltaron la versatilidad del agua de alta montaña en la cocina argentina.
La Ruta del Agua de Alta Montaña culminará en Mendoza, en la previa de la Fiesta de la Vendimia, donde los restaurantes Dante de Perdriel y Chirivía de Potrerillos sorprenderán con menús de pasos. En la Ciudad de Mendoza, el chef Diego Tapia presentará un menú inspirado en la región, con gyozas rellenas de crema de choclos, pimientos ahumados y ajíes lactofermentados, acompañadas de api crocante y pochoclo agridulce. Por su parte, el chef Aris Pabón, de Flor del Desierto, ofrecerá un chorizo artesanal de trucha, acompañado de un fermento de vísceras inspirado en el garum romano.
La Ruta del Agua de Alta Montaña ha logrado combinar la excelencia de la gastronomía argentina con la pureza del agua de la Cordillera de los Andes, ofreciendo una experiencia única que invita a los comensales a descubrir nuevos sabores mientras aprecian la belleza de cada región.