Por Agroempresario.com
El presidente de Coninagro, Lucas Magnano, insistió en la necesidad de eliminar las retenciones al trigo, destacando que, aunque la reciente reducción de estos derechos de exportación es un paso positivo, la medida definitiva debe ser la eliminación total. Durante su intervención en la 11ª edición de la Mesa Nacional del Trigo, que se desarrolló en Leones, Córdoba, Magnano subrayó que los 200 millones de dólares que el Estado dejaría de recaudar al quitar las retenciones serían fácilmente compensados por el aumento en la producción y la inversión de los productores.
"Felicito al Gobierno por la decisión de bajar las retenciones de 12% a 9,5% en el trigo, es un paso positivo. Pero creo que el camino correcto sería eliminarlas completamente", expresó Magnano ante un auditorio compuesto por el Secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, y los ministros de Producción de varias provincias, junto con los principales actores del sector del trigo. El dirigente aclaró que, aunque el impacto fiscal por la eliminación de las retenciones no es significativo, con unos 200 millones de dólares en pérdidas, la mayor inversión y crecimiento que generaría esta medida tendría efectos positivos a largo plazo.
Magnano afirmó que el sector agropecuario necesita más que nunca señales claras y positivas para seguir apostando por la producción, en especial en momentos en que la rentabilidad del trigo está severamente afectada. En este sentido, destacó que tanto los gobiernos nacionales como provinciales deben asumir su responsabilidad en el apoyo al sector.
El presidente de Coninagro advirtió sobre el estancamiento de la producción de trigo en Argentina, alertando sobre la falta de crecimiento en las cifras de producción y la continuidad de un “círculo vicioso” del cual no se puede salir. Según Magnano, este estancamiento se debe en parte a las políticas impositivas y la falta de una estrategia integral para incentivar la inversión en el campo.
“Los productores están operando con pérdidas debido a los elevados costos logísticos. El costo del transporte de trigo desde 100 km hasta 300 km representa hasta un 20% del valor del producto, lo que impacta directamente en la rentabilidad de la actividad”, destacó Magnano. Además, hizo hincapié en la situación preocupante de los productores que deciden abandonar la actividad agrícola ante las dificultades económicas, lo que está llevando a un éxodo que es "lamentable y preocupante".
Para el presidente de Coninagro, el trigo no solo es fundamental para la rotación de cultivos y la preservación de los suelos, sino que también juega un papel esencial como generador de divisas. En tiempos de crisis, cuando otras actividades económicas enfrentan dificultades, el trigo se convierte en una fuente de ingresos imprescindible para el país. Magnano remarcó que es necesario adoptar medidas para fomentar la producción y lograr que los productores sigan invirtiendo y apostando por el campo.
En su discurso, Magnano también instó a los gobiernos provinciales y locales a no eludir su responsabilidad y a aportar su parte en la mejora de la competitividad del sector agropecuario. "Es hora de que todos asumamos nuestra parte del esfuerzo, tanto a nivel nacional como provincial", expresó. Además, remarcó la necesidad de establecer “reglas claras” para el sector, citando la urgente necesidad de avanzar en la sanción de una ley de semillas y fertilizantes que brinde certeza y seguridad jurídica a los productores.
Finalmente, el dirigente cerró su intervención con un llamado a la unidad del sector agropecuario y a la colaboración entre todos los actores para sacar adelante la producción. "Tenemos que recuperar el protagonismo histórico que el campo tuvo en la economía argentina. Si trabajamos unidos, podremos lograr la Argentina que alguna vez soñamos", concluyó Magnano.