Por Agroempresario.com
Este miércoles, Lucas Magnano, presidente de Coninagro, se refirió a temas clave que atraviesan al sector productivo nacional, como la reducción de retenciones, las economías regionales y las expectativas para la próxima campaña agrícola.
En diálogo con TN, Magnano expresó que los productores esperan que el Gobierno convierta la baja temporal de las retenciones en una medida permanente. “La recaudación por retenciones al trigo no es significativa para el Estado, pero sí es un gran alivio para los productores”, aseguró. Además, destacó que si la actividad económica se mantiene estable, es probable que el Gobierno envíe señales positivas para el sector.
La declaración de Magnano tuvo lugar en el marco de su participación en la muestra organizada por la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA) en La Violeta, partido de Pergamino, donde analizó las perspectivas económicas del agro para el 2025.
El presidente de Coninagro también enfatizó la necesidad de impulsar medidas que favorezcan la competitividad de las economías regionales, las cuales enfrentan dificultades debido al aumento de los costos de producción. “La situación de las economías regionales es complicada por el aumento de costos. Hay que generar acciones que les permitan recuperar competitividad”, explicó.
En este sentido, señaló que varias producciones están siendo afectadas por la pérdida de competitividad generada por los reajustes de los precios relativos en Argentina. En particular, hizo referencia a la crisis de la producción de yerba mate en Misiones: “Tenemos serios problemas con un exceso de hoja verde, lo que genera precios muy bajos para el productor y complica su rentabilidad”.
Magnano advirtió que esta situación también se está replicando en otras producciones como la uva y otros cultivos regionales. “Lamentablemente, creemos que la uva está camino a enfrentar una crisis similar. Nos preocupa y vamos a buscar medidas para mitigar los efectos en los sectores más afectados”, añadió.
Desde Coninagro, aseguró que están comprometidos a gestionar acciones que permitan aliviar la carga fiscal de los productores. “Nos preocupa qué va a pasar en julio cuando se discuta la continuidad de la baja de impuestos a nivel nacional. Es necesario avanzar también en los niveles provinciales y municipales para reducir la presión sobre el sector productivo”, indicó.
Otro de los puntos clave que abordó Magnano fue la política del Gobierno respecto al tipo de cambio y su impacto en el agro. Señaló que la decisión del Ejecutivo de no realizar devaluaciones periódicas plantea un desafío adicional para la competitividad del sector. “Durante años, las devaluaciones ayudaron a corregir ciertos desbalances, pero hoy el escenario es diferente. Por eso, tenemos que enfocarnos en reducir costos y aumentar la eficiencia en la producción”, explicó.
También se refirió a la carga impositiva que enfrentan las empresas del sector, haciendo especial énfasis en la necesidad de revisar los anticipos impositivos que restan liquidez a los productores. “El ministro de Economía, Luis Caputo, ha mencionado que el impuesto a los créditos y débitos bancarios está en evaluación. Esto es un avance, pero necesitamos un esquema fiscal más equilibrado que no asfixie al productor”, afirmó.
Magnano expresó su esperanza de que la baja de retenciones se mantenga después de junio. “Es una esperanza leve, pero creemos que con buenos resultados en la recaudación, el Gobierno tendrá margen para sostener esta medida”, sostuvo.
De cara a los próximos encuentros del sector, Magnano confirmó que en Expoagro habrá una reunión de la Mesa de Enlace y no se descarta un posible encuentro con el ministro Caputo. “En Expoagro vamos a reunirnos con los integrantes de la Mesa de Enlace y probablemente tengamos una reunión con Caputo para evaluar la situación fiscal del agro”, comentó.
El dirigente también destacó que la recaudación de enero fue muy positiva, con un superávit primario y financiero interesante. “Esto nos fortalece y nos da margen para empezar a discutir una reducción más amplia de impuestos que beneficie al campo”, afirmó.
En relación con el trigo, Magnano destacó la importancia de la Mesa Nacional del Trigo y la necesidad de avanzar en medidas que impulsen el crecimiento del sector. “Siempre estamos hablando de la misma producción y las mismas hectáreas sembradas. Es hora de romper ese círculo vicioso y generar un crecimiento real”, expresó.
El dirigente insistió en la eliminación definitiva de las retenciones al trigo, argumentando que la recaudación que genera para el Estado es mínima en comparación con el impacto positivo que tendría su eliminación en la productividad del sector. “Con los números actuales de recaudación, la eliminación de las retenciones representaría entre 200 y 250 millones de dólares, una cifra manejable para el Estado, pero que haría una gran diferencia para los productores”, explicó.
Finalmente, Magnano enfatizó que la eliminación de las retenciones permitiría incrementar la producción, mejorar la competitividad y generar un crecimiento sostenido para el agro argentino. “El sector necesita señales claras del Gobierno para poder planificar a largo plazo. Apostamos a que esta medida sea definitiva y no solo una decisión temporal”, concluyó.