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Por Agroempresario.com
El Gobierno argentino se encuentra avanzando en la búsqueda de un tratado de libre comercio con Estados Unidos, aunque reconoce que las negociaciones podrían demorarse al menos un año. Desde la Casa Rosada, se asegura que aún no han iniciado contactos formales con el Departamento de Estado de EE.UU., pero que ya han mantenido conversaciones informales con representantes de la administración de Donald Trump. La Casa Rosada mantiene que, aunque las discusiones previas no han dado resultados concretos, los avances están en marcha.
“Es complicado conseguir un tratado de libre comercio. Lleva su tiempo, es lógico que las negociaciones duren más de un año”, afirmaron desde el Gobierno. Con un enfoque pragmático, el Ejecutivo sabe que este proceso no será rápido y está consciente de las complejidades que implica negociar un acuerdo de este calibre. Además, el Gobierno argentino asegura que, aunque las conversaciones están en curso, aún no hay un calendario definitivo.
Para acelerar el proceso, el presidente Javier Milei designó por decreto a Alec Oxenford como embajador en Estados Unidos, pese a que su pliego aún no fue tratado en el Congreso. Esta decisión se enmarca dentro de los esfuerzos por fortalecer las relaciones con EE.UU. y poner en marcha las gestiones comerciales que, según fuentes oficiales, se están trabajando desde la Casa Rosada.
Además, se destaca el interés del Gobierno en profundizar las alianzas políticas con la administración estadounidense, con el objetivo de concretar un acuerdo en el menor tiempo posible. Un claro ejemplo que mencionan en la Casa Rosada es el caso de Corea del Sur, que logró cerrar un tratado de libre comercio con EE.UU. en tan solo 11 meses, lo que alimenta las expectativas de que Argentina podría seguir un camino similar.
El presidente Milei ya ha tenido un primer encuentro con el exmandatario Donald Trump en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), y se espera que en los próximos meses pueda viajar a Washington para una reunión formal en la Casa Blanca. En esa ocasión, Milei le comunicó a Trump su disposición de abandonar el Mercosur si eso fuera necesario para concretar el tratado comercial con EE.UU. Este cambio en la postura respecto al bloque sudamericano está alineado con la intención de negociar acuerdos bilaterales que favorezcan a la economía argentina.
En ese sentido, el Gobierno considera que, mientras Argentina siga formando parte del Mercosur, no tiene sentido pedir una excepción sobre los aranceles del 25% que Estados Unidos impuso al acero y aluminio. “Mientras sigamos en el Mercosur no tiene sentido que hagamos ese pedido porque no podemos ofrecerles lo mismo”, explican en el Ejecutivo.
Paralelamente a las negociaciones con Estados Unidos, el presidente Milei también está concentrado en alcanzar un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Según fuentes cercanas a la Casa Rosada, la firma de un acuerdo con el FMI por más de US$10.000 millones es clave para acelerar la salida del cepo cambiario y fortalecer las bases económicas del país. En Balcarce 50, la Casa Rosada asegura que el acuerdo con el FMI está cerca de concretarse y que solo faltan definir detalles sobre la secuencia de los desembolsos.
En cuanto a la relación con el Congreso, el Ejecutivo evalúa alternativas para acelerar el tratamiento legislativo del acuerdo con el FMI, ya que consideran que su sanción antes de las elecciones de mitad de término sería crucial para consolidar la estabilidad económica del país. “Haremos todos los intentos dentro de la ley para que el acuerdo se sancione antes de las elecciones”, afirman en la Casa Rosada.
