Por Agroempresario
La creciente demanda de alimentos y el impacto del uso intensivo del suelo han llevado a los productores agropecuarios a repensar sus estrategias de manejo. En este contexto, una empresa familiar de larga trayectoria decidió apostar por una innovadora unidad de negocios enfocada en la nutrición eficiente de cultivos.
El Grupo Ferrero Agro, con sede en el sur de Córdoba, lanzó recientemente su nueva división, Ferrero NutriAgro, con el objetivo de mejorar la salud del suelo y aumentar el rendimiento productivo mediante técnicas de bioestimulación y un enfoque integral de fertilización. “La clave está en entender las necesidades específicas del suelo y los cultivos, no solo en aplicar fertilizantes de manera sistemática”, afirmó Marcos Ferrero, director de la firma.
El lanzamiento de esta nueva unidad se realizó en un evento en la ciudad de Laboulaye, donde se dieron cita productores, agrónomos y especialistas del sector. Durante la jornada, se abordaron problemáticas como la pérdida de materia orgánica en los suelos, la baja eficiencia en la absorción de nutrientes y el impacto del cambio climático en la producción agropecuaria.
Uno de los ejes centrales de la propuesta de Ferrero NutriAgro es la implementación de diagnósticos avanzados. “La mayoría de los esquemas tradicionales de fertilización solo consideran los macronutrientes principales, pero dejamos de lado otros elementos esenciales para la productividad”, explicó Ramiro Gómez, ingeniero agrónomo y coordinador técnico de la empresa. En este sentido, la empresa trabaja con un modelo de análisis que evalúa más de 20 parámetros del suelo, permitiendo elaborar estrategias personalizadas para cada lote.
Para llevar adelante esta propuesta, la empresa cuenta con un equipo multidisciplinario integrado por especialistas en suelos, biotecnólogos e ingenieros agrónomos. Además, estableció una alianza con laboratorios de referencia y desarrolladores de bioinsumos, con el fin de ofrecer a los productores tecnologías de última generación.
En el evento, también se destacó la importancia de la bioestimulación en los cultivos. “Las condiciones de estrés abiótico son cada vez más frecuentes y pueden reducir drásticamente los rendimientos. Incorporar herramientas que mejoren la resiliencia del cultivo es fundamental”, indicó Agustina Leiva, doctora en biotecnología y asesora del programa de nutrición de Ferrero NutriAgro.
El encuentro finalizó con un panel de discusión sobre el futuro del agro en Argentina. Se destacó la necesidad de innovar en el manejo del suelo y adaptarse a un escenario productivo donde la eficiencia será determinante. “En un contexto de cambios económicos y climáticos, no basta con producir más, sino que debemos producir mejor”, concluyó Ferrero.