Por Agroempresario.com
En Expoagro 2025, tres envasadoras robotizadas se destacaron entre los productos innovadores de la feria, capturando la atención de los visitantes y ofreciendo una solución clave para los productores agropecuarios. Las máquinas, capaces de envasar productos granulados, en polvo, líquidos y semilíquidos, son el resultado de la creatividad y esfuerzo de la familia Carlini, de Pueblo Esther, una localidad situada a 15 kilómetros de Rosario.
Pablo Carlini, socio gerente de Carlini Hnos., explicó con entusiasmo el propósito de su empresa: "Nos dedicamos a fabricar máquinas que envasan productos como azúcar, leche, harina o legumbres. La idea es permitir que los productores agropecuarios puedan transformar lo que cosechan o producen en sus campos, envasarlo y comercializarlo por su cuenta, ya sea para el mercado interno o para exportar". Esta misión no es nueva para los hermanos Carlini, quienes cuentan con años de experiencia en la fabricación de maquinaria industrial. Sin embargo, hace tres años decidieron enfocarse en el diseño de envasadoras automáticas para ayudar a los productores a dar un valor agregado a sus cultivos.
La fábrica de los Carlini, ubicada en Pueblo Esther, es el corazón del emprendimiento familiar. Desde allí, los tres hermanos comenzaron a idear y desarrollar envasadoras de última tecnología que, según cuentan, están ayudando a transformar la producción agropecuaria en un proceso más eficiente y rentable. "Hoy estamos en pleno crecimiento y tenemos grandes expectativas", afirmó Pablo Carlini.
El debut de la firma en Expoagro este año fue un paso importante. "Vinimos con la idea de mostrar nuestro trabajo, pero también para conocer las necesidades de los productores y ofrecerles las herramientas necesarias para mejorar sus procesos de producción", dijo Carlini. Las máquinas que presentan pueden envasar una amplia variedad de productos: desde granos como azúcar, arroz y legumbres (lentejas, garbanzos, porotos, arvejas), hasta productos en polvo como harina de trigo, leche en polvo y especias. También son capaces de envasar productos líquidos y semilíquidos, como leche líquida, grasa vacuna y dulces como dulce de batata y dulce de membrillo.
La especialización de los Carlini es ofrecer maquinaria adaptable a las distintas necesidades de los productores. "Cada cliente tiene necesidades distintas, por eso fabricamos máquinas a medida que se ajustan a lo que cada productor requiere", comentó. Uno de los puntos fuertes de sus envasadoras es la posibilidad de trabajar a diferentes velocidades según el tipo de producto. Por ejemplo, envasar legumbres y azúcar a 60 envases de medio kilo por minuto, mientras que los dulces como batata o membrillo se envasan a 20 o 30 unidades por minuto.
Los hermanos Carlini también desarrollan máquinas semiautomáticas para pequeños productores, que requieren menores volúmenes de producción. Estas máquinas son estándares, pero permiten cambiar los dosificadores según el tipo de producto que se envasará. Además, desarrollan su propio software para mejorar la automatización de los procesos y también incluyen opciones automáticas y semiautomáticas para emprendedores más pequeños.
"Lo que queremos es acompañar a los productores con tecnología nacional, brindándoles soluciones que les permitan dar un paso más en la comercialización de sus productos", destacó Carlini. Este primer año en Expoagro fue clave para la empresa, ya que les permitió mostrar su trabajo, escuchar a los productores y seguir desarrollando productos que ayuden al sector agropecuario a agregar valor a sus cosechas.
De este modo, la familia Carlini continúa con su objetivo de potenciar la industria agropecuaria a través de la innovación y el uso de tecnología avanzada. Con una mirada puesta en el crecimiento y la mejora continua, los emprendedores siguen apostando por la maquinaria nacional como una herramienta clave para el futuro del agro.