Agroempresario.com
La aparición de decenas de peces muertos y una espuma inusual en las playas de Waitpinga y Parsons, al sur de Adelaida, Australia, provocó el cierre preventivo de estas costas debido a los riesgos para la salud. El fenómeno, que se extendió por varios cientos de metros, ha causado preocupación tanto en autoridades sanitarias como en los propios turistas y surfistas, quienes experimentaron síntomas respiratorios tras su exposición al agua.
La causa de este extraño evento parece estar relacionada con una floración de microalgas, confirmada por la Autoridad de Protección Ambiental de Australia del Sur (EPA). La floración habría matado a los peces y también podría ser responsable de los malestares respiratorios que afectaron a varios visitantes de las playas durante el fin de semana. Entre los síntomas más comunes se incluyen tos, dolor de garganta, irritación ocular y visión borrosa.
La espuma generada por las algas se detectó en varias playas cercanas, lo que amplió las preocupaciones sobre el impacto de este fenómeno en la salud pública. La espuma, que variaba en color entre blanco sucio y amarillo, también causó alarma en las autoridades locales, quienes decidieron cerrar las playas hasta que se pueda garantizar la seguridad de los visitantes. El Departamento de Medio Ambiente y Agua de Australia señaló que la medida fue tomada debido a un “evento de mortalidad de peces en la zona”.
Investigaciones adicionales sobre la causa de este fenómeno fueron iniciadas por el Departamento de Industrias Primarias y Regiones (PIRSA), que se propuso determinar si hubo presencia de enfermedades animales infecciosas o contaminantes en el agua. Las condiciones climáticas de los últimos días, que incluyeron altas temperaturas, escaso viento y mareas bajas, habrían favorecido la proliferación de microalgas. Científicos marinos tomaron muestras de agua y espuma el lunes por la mañana, y los resultados de los análisis podrían tardar hasta el final de la semana en conocerse.
Según la EPA, la descomposición de las microalgas puede generar subproductos tóxicos que afectan tanto a la fauna marina como a los seres humanos expuestos. En este caso, las algas liberan partículas en el aire que, al ser inhaladas, generan las respuestas alérgicas reportadas por varios afectados.
Los vecinos y surfistas locales fueron los primeros en notar los efectos del fenómeno. Anthony Rowland, un surfista habitual de la zona, relató que después de surfear en Waitpinga, comenzó a toser y a sufrir irritación ocular y dolor de garganta. Publicó su experiencia en redes sociales, lo que provocó que otras personas compartieran síntomas similares, incluidos cuadros de visión borrosa.
David Cunliffe, asesor principal en calidad de agua de SA Health, explicó que las floraciones de algas pueden liberar partículas tóxicas al aire, lo que provoca respuestas alérgicas como irritación de ojos, vías respiratorias y síntomas similares a los de la gripe. Además, las personas expuestas a estas algas pueden experimentar problemas de visión y erupciones cutáneas en algunos casos.
Mientras los estudios continúan, las autoridades locales recomendaron evitar el contacto con el agua y alejarse de las áreas donde se observe espuma o cambios en el color del agua. También sugirieron lavarse con agua limpia en caso de haber estado expuesto, para reducir el riesgo de reacciones alérgicas.
Este incidente pone de relieve la importancia de monitorear y estudiar los fenómenos naturales que pueden tener impactos significativos en la salud pública y en el medio ambiente. Las autoridades seguirán de cerca la situación y emitirán nuevas recomendaciones según se disponga de más información.