Por Agroempresario.com
Argentina está en el centro de la escena minera global tras su destacada participación en la PDAC en Canadá, uno de los eventos más importantes del sector. En este contexto, el empresario minero canadiense Robert McEwen, dueño de McEwen Corporate y principal inversor en el proyecto sanjuanino Los Azules, sostiene que el país podría superar a Perú en producción de cobre en la próxima década.
La PDAC, celebrada en Toronto, reunió a referentes de la minería mundial, y Argentina tuvo una de sus delegaciones más importantes hasta la fecha. Gobernadores, funcionarios nacionales y proveedores del sector minero expusieron sobre el crecimiento del país en esta industria.
McEwen destacó que la participación argentina reflejó un cambio en la percepción internacional, impulsada por las nuevas políticas de incentivo a la inversión extranjera promovidas por el presidente Javier Milei. "El gobierno ahora quiere darle un gran impulso a la minería, lo que no ocurría antes. Esto genera entusiasmo y confianza entre los inversores", afirmó el empresario.
El Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) es una de las principales medidas adoptadas por el Gobierno para fomentar la llegada de capital extranjero. Sin embargo, McEwen señala que el desafío estará en la agilidad para aprobar proyectos dentro de este marco regulatorio. "Los inversores quieren ver qué tan rápido se procesan las solicitudes. Lo ideal sería que el proceso no tomará más de un par de meses", indicó.
El sector minero ya ha comenzado a atraer inversiones multimillonarias, como la de BHP y Lundin (US$ 4.500 millones) y la compra de activos por parte de Rio Tinto por US$ 6.700 millones. Estas cifras reflejan una confianza creciente en la estabilidad y el potencial de la minería argentina.
McEwen Corporate es la accionista mayoritaria del proyecto Los Azules en San Juan, considerado el octavo yacimiento de cobre no desarrollado más grande del mundo. Según el empresario, el estudio de factibilidad será publicado en junio, mientras que la aprobación del RIGI podría llegar en el tercer trimestre del año. Una vez que esto ocurra, la compañía planea una oferta pública inicial (IPO) para cotizar en bolsa y atraer mayor financiamiento.
El proyecto podría ser solo el inicio de una gran transformación minera en Argentina. "Hemos encontrado evidencias de otro yacimiento de cobre en la misma propiedad, a solo tres kilómetros de distancia. Esto podría significar que hay más depósitos aún por descubrir", explicó McEwen.
La hipótesis de McEwen sobre el futuro de la minería argentina es ambiciosa. "Si todas las minas de cobre en desarrollo se concretan, Argentina podría producir más cobre que Perú en los próximos 10 a 15 años", afirmó.
Actualmente, Chile y Perú representan cerca del 40% de la producción global de cobre. Para que Argentina compita en este nivel, será fundamental el desarrollo de infraestructura, incluyendo nuevas carreteras y líneas ferroviarias. "La minería genera enorme riqueza, pero también depende de los ciclos del mercado. Hoy el cobre cotiza a US$ 4,20 por libra, pero en el pasado ha caído hasta los US$ 0,60", advirtió.
McEwen cree que este es un buen momento para obtener financiamiento en el sector minero, ya que los commodities están en un ciclo de baja en relación con otros activos financieros. "Históricamente, estos ciclos cambian y los commodities vuelven a subir. Es una oportunidad para invertir", aseguró.
En comparación con otros proyectos mineros en la región, Los Azules presenta ventajas competitivas: mayor cantidad de recursos, una ley de cobre superior y una altitud menor, lo que facilita las operaciones. "Nuestra inversión inicial es menor que la de otros proyectos, y no generaremos desechos de cola. Queremos transformar el sitio en una joya del paisaje, no en una cicatriz ambiental", afirmó McEwen.
Uno de los factores clave que ha favorecido la atracción de inversiones mineras en Argentina es el cambio en la percepción de los inversores internacionales. "Antes, cuando se hablaba de Argentina, la reacción era negativa debido a la incertidumbre económica y regulatoria. Ahora, los inversores ven oportunidades y quieren participar", explicó McEwen.
El empresario destacó la calidad de la mano de obra argentina y su potencial para el desarrollo minero. "Argentina tiene una población educada y capacitada, además de una gran riqueza natural. Antes solo se hablaba de Chile y Perú en minería sudamericana, pero ahora Argentina está en el radar", afirmó.
McEwen reconoció que sin las recientes reformas del gobierno de Milei, el avance de Los Azules y otros proyectos mineros habría sido difícil. "Antes, los inversores temían poner dinero en Argentina. Ahora, con las nuevas políticas, hay confianza en que las inversiones serán rentables", comentó.
Uno de los desafíos pendientes es el cambio en la percepción social sobre la minería. "Muchas personas aún tienen una imagen negativa de la industria basada en prácticas antiguas. Hoy, la minería es mucho más sustentable. Existen ejemplos de recuperación ambiental exitosa, como Sudbury en Canadá, que pasó de ser un paisaje lunar a un bosque frondoso", explicó.
Para McEwen, es clave educar a las nuevas generaciones sobre la importancia de la minería en la vida moderna. "Los metales están en los autos, aviones, celulares y tecnología que usamos a diario. La minería es fundamental para el desarrollo", concluyó.
Con inversiones en crecimiento, cambios regulatorios y un nuevo interés internacional, Argentina podría estar en camino a convertirse en un actor clave en la producción global de cobre.