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Por Agroempresario.com
En un acto institucional cargado de simbolismo y responsabilidad histórica, el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, participó este jueves en la entrega de diplomas a los 69 convencionales reformadores que tendrán a su cargo la reforma de la Constitución Provincial. El evento se realizó en el Museo de la Constitución de la ciudad de Santa Fe y marcó el inicio formal de un proceso inédito que busca modernizar una Carta Magna que lleva más de seis décadas sin cambios.
La Convención Constituyente, cuyo inicio formal será el 14 de julio, representa un paso decisivo para Santa Fe, una de las pocas provincias argentinas que aún no ha adaptado su Constitución a los tiempos actuales. Pullaro, además de gobernador, fue electo como convencional reformador, y no ocultó su ambición de construir una Constitución que erradique privilegios, promueva la transparencia, y refuerce los valores democráticos.
Durante su discurso, Pullaro resaltó la madurez del sistema político provincial al haber logrado, tras 63 años, conformar una convención plural, representativa y con diversidad de pensamientos:
“En un país que muchas veces está atravesado por la agresión política, en Santa Fe logramos ponernos de acuerdo y sancionar una ley que habilita esta reforma”.
El mandatario remarcó la importancia de que la nueva Constitución incluya el principio de “ficha limpia”, la eliminación de los fueros parlamentarios y una regulación que impida que los corruptos ocupen cargos públicos. “Queremos una Constitución renovada, moderna, que hable de la gente y no de los delincuentes, que garantice el equilibrio fiscal, fortalezca el sistema educativo y potencie las oportunidades de crecimiento de la provincia”, sentenció.
La ceremonia fue presidida por el titular del Tribunal Electoral Provincial, Roberto Falistocco, junto a los vocales Alfredo Ivaldi Artacho y Roberto Dellamónica, y el secretario electoral Pablo Ayala. La composición de los convencionales incluye 50 electos por distrito único y 19 por cada uno de los departamentos de Santa Fe.
Del evento también participaron figuras claves del arco político y judicial provincial como Felipe Michlig, Clara García, Juan Pablo Poletti, Fabián Bastia, Domingo Rondina, Rafael Gutiérrez, Rubén Weder y María Cecilia Vranicich, quienes destacaron la relevancia institucional del momento.
La Ley de Necesidad de Reforma N° 14.384, sancionada en diciembre de 2024, habilita la modificación de 42 artículos. Entre los puntos centrales se encuentran:
Pullaro expresó que espera que la Convención funcione como una herramienta de consenso y diálogo, y convocó a todas las fuerzas políticas a debatir con madurez y responsabilidad:
“El liderazgo de esta reforma lo tiene el pueblo de la provincia. Todos debemos aportar para construir la mejor Constitución posible”.
Según establece el artículo 10 de la ley de reforma, la Convención deberá concluir su labor en un plazo de 40 días corridos, con posibilidad de prórroga por otros 20 días si así lo aprueba la mayoría absoluta de sus miembros. Las deliberaciones tendrán como epicentro el recinto de la Cámara de Diputados en Santa Fe, pero también se realizarán comisiones en Rosario.
La tarea no será sencilla. Alcanzar consensos sobre temas tan sensibles como la duración de los mandatos, los fueros o las autonomías locales exigirá una dinámica de negociación constante, apertura al diálogo y voluntad de ceder en pos de un bien mayor: una Constitución adaptada al siglo XXI.
Pullaro enfatizó que la nueva Constitución debe contemplar las verdaderas problemáticas que atraviesan a la sociedad santafesina. “Vamos a generar más cargos para auxiliares, para que no recaiga solo en los docentes la carga de contención social”, dijo. Y agregó:
“Vivimos en una sociedad cada vez más violenta, donde la escuela cumple un rol cada vez más complejo. Necesitamos una Constitución que fortalezca lo educativo como herramienta de transformación social”.
Aunque el gobernador de Santa Fe no lo mencionó directamente en este acto, la idea del equilibrio fiscal como eje constitucional fue reforzada por otros gobernadores como Sergio Ziliotto, de La Pampa, quien también está llevando adelante una política de responsabilidad fiscal sostenida.
Ziliotto expresó:
“No es un superávit coyuntural, es una política. No vamos a permitir que nos trasladen un ajuste que implica cerrar escuelas y hospitales. Con menos recursos, nos cargan todas las responsabilidades del Estado”.
Sus declaraciones resaltan un tema compartido por muchas provincias: la necesidad de autonomía económica y previsibilidad financiera para garantizar derechos esenciales.
Pullaro dejó en claro que esta reforma constitucional no debe tener una impronta partidaria, sino ser una construcción colectiva. “No queremos una Constitución del oficialismo, sino de todos los santafesinos”, afirmó. La intención es que el nuevo texto constitucional refleja un pacto social que perdure, que sea el marco para el desarrollo productivo, educativo e institucional de la provincia en las próximas décadas.
