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Por Agroempresario.com
En un contexto de competencia tecnológica y tensiones comerciales entre potencias globales, el CEO de Huawei, Ren Zhengfei, ofreció una visión clara sobre los desafíos que enfrenta China en el sector de los semiconductores. En una entrevista publicada por el diario estatal People’s Daily, el directivo reconoció que los chips desarrollados por su empresa todavía se encuentran “una generación por detrás” de los fabricados en Estados Unidos, y al mismo tiempo, defendió enfáticamente el modelo político y económico chino liderado por Xi Jinping.
“Nuestros chips individuales siguen estando una generación por detrás de los estadounidenses. Utilizamos las matemáticas para compensar la física”, explicó Ren, en un análisis técnico que pone de manifiesto las limitaciones que todavía enfrenta la industria de alta tecnología en China, en gran parte como consecuencia de las restricciones impuestas por Washington.
La entrevista no fue solo una evaluación técnica, sino también una defensa apasionada del modelo socialista de mercado chino. Según el fundador de Huawei, ese sistema ha sido clave para permitir el desarrollo de infraestructuras a gran escala como trenes de alta velocidad, autopistas y presas, logros que, según él, no hubieran sido viables bajo regímenes democráticos o economías de mercado convencionales.
Ren sostuvo que “uno de los objetivos fundamentales del socialismo es promover el desarrollo de la sociedad”, y que solo bajo un régimen como el del Partido Comunista Chino (PCCh) es posible sostener proyectos de gran envergadura que, aunque no rentables a corto plazo, son vitales para el crecimiento del país.
La entrevista fue publicada el 10 de junio de 2025 en la portada del People’s Daily, el órgano oficial del Comité Central del PCCh. En ella, Ren también citó al presidente Xi Jinping, quien subrayó que “la fuerza de un país o una nación siempre se sustenta en la prosperidad cultural”. Esta cita fue enlazada por el CEO con el avance de la inteligencia artificial (IA), destacando que su desarrollo requiere condiciones técnicas como un suministro eléctrico suficiente y una infraestructura de red sólida.
En este sentido, Ren remarcó que la combinación entre apertura económica y administración centralizada permite generar un entorno que estimula la innovación y facilita la creación de un mercado nacional unificado, capaz de absorber los productos de alta tecnología generados por las empresas locales.
Aunque elogió los logros del modelo chino, Ren también hizo hincapié en la necesidad de seguir avanzando hacia un entorno legal y orientado al mercado. “Las empresas deben enfocarse en la creación de valor, el avance tecnológico, el cumplimiento de la ley y el pago de impuestos”, declaró.
Estas afirmaciones ocurren en un momento en el que Huawei intenta recuperar su liderazgo global tras haber sido objeto de múltiples sanciones por parte del gobierno estadounidense, que la acusa de colaborar con actividades de espionaje y violar restricciones comerciales. Estas medidas impactaron directamente en la capacidad de la empresa para acceder a tecnologías clave, incluyendo diseños avanzados de chips y herramientas de fabricación de última generación.
El directivo no esquivó este desafío. Al contrario, lo reconoció abiertamente y sostuvo que el desarrollo tecnológico nacional sigue dependiendo en gran medida de superar bloqueos tecnológicos internacionales. Frente a estas limitaciones, Huawei ha optado por intensificar sus esfuerzos en investigación y desarrollo, y colaborar con otras compañías chinas para construir una cadena de suministro nacional autónoma.
En otro tramo de la entrevista, Ren afirmó que el objetivo del país es alcanzar “un gran rejuvenecimiento” mediante la consolidación de su liderazgo en sectores estratégicos como la inteligencia artificial, los semiconductores y las telecomunicaciones 5G. Para lograrlo, subrayó la necesidad de mantener políticas claras, planificación a largo plazo y un compromiso firme del Estado.
Resulta llamativo que Ren asocie el éxito de estas estrategias a la existencia de un sistema político centralizado, cuando en realidad los grandes desarrollos en infraestructura y tecnología han sido históricamente liderados por economías democráticas y de libre mercado, como Japón y Estados Unidos. No obstante, para el CEO de Huawei, el modelo chino representa una ventaja competitiva que otros países no pueden replicar.
En la misma línea, el People’s Daily presentó la entrevista como un ejemplo del pensamiento alineado con los valores del Partido Comunista, destacando a Huawei como un modelo de empresa que combina eficiencia económica, fidelidad ideológica y compromiso con el desarrollo nacional.
A pesar de las tensiones internacionales, Huawei continúa siendo una pieza clave del ecosistema tecnológico chino. Sus avances en infraestructura de telecomunicaciones y el desarrollo de soluciones propias para la producción de chips son observados con atención tanto por competidores como por gobiernos del mundo.
En este contexto, las palabras de Ren no solo reflejan una posición empresarial, sino también un alineamiento estratégico con los objetivos geopolíticos del régimen de Xi. La fusión entre poder político y desarrollo económico es, para el líder de Huawei, la única vía posible hacia la autosuficiencia tecnológica de China.
