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Por Agroempresario.com
En un movimiento estratégico de excepcional alcance, la provincia de Corrientes ha ejecutado una inversión pública de casi US$ 100 millones, en su mayoría recursos propios, para fortalecer su emergente condición de potencia forestoindustrial. Este desembolso incluye la inauguración del Puerto de Ituzaingó, el nuevo Parque Industrial de Ituzaingó y la realización de la primera Expo Foresto Industrial, en un predio de más de 500 hectáreas, al que asistieron los principales actores del sector forestal y representantes de gobiernos nacional y provincial.
El gobernador Gustavo Valdés encabezó la inauguración del puerto, que se perfila como una salida logística clave para la cadena de valor forestoindustrial. Desde allí se podrán embarcar productos como madera aserrada, chips, pasta celulósica, resina y tableros, conectando Corrientes con mercados internacionales. “Tenemos más de 500.000 hectáreas forestadas de pino y eucaliptus; corresponde a la función esencial del Gobierno industrializar la provincia”, aseguró Valdés.
El puerto se encuentra a tan solo 70 km del mayor aserradero de la provincia, el de ACON Timber, una empresa de capitales austríaco-belgas que invirtió US$ 300 millones para operar en Gobernador Virasoro. El gobernador definió la obra como "una puerta estratégica de salida para el desarrollo económico regional”.
El lanzamiento del parque industrial, también en las afueras de Ituzaingó, marcó otro momento relevante de la estrategia estatal. Ubicado en un predio donado por el empresario Hugo Sigman, fundador de Grupo Insud, el espacio fue concebido para atraer inversiones complementarias al núcleo exportador. Sigman adquirió el terreno por US$ 1,8 millones, proveniente de un fideicomiso de ANSES, fortaleciendo así el compromiso público-privado en la iniciativa.
La primera Expo Foresto Industrial de Corrientes se realizó en ese parque y contó con la participación de empresas destacadas como Arauco Argentina, Forestal Las Marías, Simacon, Bosques del Plata (de CMPC), y Central Puerto, que ya posee 150.000 hectáreas plantadas entre Corrientes y Entre Ríos.
Según el ministro de la Producción, Claudio Anselmo, la forestoindustria se convirtió en 2023 en el principal rubro exportador de Corrientes, con ventas por US$ 120 millones. Para este año, proyecta alcanzar los US$ 150 millones, con proyección aún más ambiciosa si se consideran los productos que salen por puertos fuera de la provincia.
En este contexto, Corrientes busca atraer una megaplanta de pasta celulósica con una inversión estimada de US$ 2.000 millones. Esa inversión colocaría a la región, junto a Misiones y Entre Ríos, en la élite forestoindustrial del Cono Sur, al tiempo que diversifica su matriz productiva.
Históricamente, Misiones llevó la delantera en forestales gracias a plantaciones tempranas y estimulaciones impositivas en los '60 y '70. Corrientes, en cambio, comenzó su trama forestal avanzada a fines de los '70 y aceleró el proceso en las últimas dos décadas, con inversiones como la de ACON Timber y las centrales de biomasa de Grupo Insud para generar energía con residuos forestales.
El consultor Gustavo Cetrángolo subraya: “Corrientes no tiene forestación nativa; su desarrollo fue fruto de siembra masiva de pino y eucaliptus, seguido por industrialización”.
El verano de 2022, con incendios que consumieron un millón de hectáreas, fue un punto de inflexión. En respuesta, Corrientes inauguró un destacamento de la Brigada de Incendios Forestales, equipado con 25 autobombas de alta tecnología adquiridas en Europa por un total de US$ 12,5 millones, explicó el ministro de Seguridad Alfredo Vallejos. Además, se planea implementar alquiler de aviones y helicópteros hidrantes, reforzando así la capacidad de respuesta ante catástrofes naturales.
Durante el evento inaugural, Valdés reconoció al empresario Hugo Sigman por su papel clave en el desarrollo provincial. También resaltó la labor de ACON Timber y de otros actores como Central Puerto, Simacon y Bosques del Plata. Estas empresas se suman al programa estatal como actores fundamentales de una red productiva robusta.
Los convenios firmados amplían el potencial de exportación, generan empleos directos en la industria y multiplican los empleos indirectos en logística, comercio y servicios asociados.
El gran reto de la provincia es consolidar inversiones millonarias para una planta de pasta celulósica. La reconversión productiva requiere voluntad política, respaldo financiero y reducción de costos logísticos. Asimismo, la región compite con otros polos forestales del país y el extranjero.
No obstante, el plan plus incluye diversificación: la actividad arrocera, con una superficie plantada que superó las 120.000 hectáreas, podría alcanzar 200.000 ha en cinco años. “Ya plantamos más arroz que España”, destacó Anselmo.
Con infraestructura, índole exportadora y gestión ambiental sólida, Corrientes se posiciona como un modelo destacado de desarrollo territorial en la Argentina. Su apuesta al polo forestoindustrial, al control de incendios y a la agroindustria diversificada genera señales potentes hacia sectores privados e inversores extranjeros.
