Por Agroempresario.com
La Patagonia argentina vuelve a sorprender con un fenómeno natural extraordinario: el frío extremo de los últimos días provocó que la Cascada de Opazo, ubicada en la provincia de Chubut, quedara completamente congelada, generando un paisaje de hielo de más de 30 metros de altura que se viralizó en redes sociales y atrae la atención de turistas y científicos por igual.
Las bajas temperaturas alcanzaron un pico histórico de -17.2 °C, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el lunes 30 de junio. Estas condiciones extremas causan que el agua en caída libre se solidificara, transformando la cascada en una impresionante pared de hielo donde apenas un fino hilo de agua sigue su curso. El paisaje se viste así con estalactitas y formaciones heladas que sorprenden incluso a quienes conocen bien el clima patagónico.
La Cascada de Opazo se sitúa a unos 30 kilómetros de Río Pico, un pequeño poblado del suroeste de Chubut. Para llegar, se recorren alrededor de 6 kilómetros por caminos de ripio y senderos que atraviesan bosques y estepa, un entorno natural reconocido por su belleza en todas las estaciones. Sin embargo, esta temporada de invierno presenta un fenómeno inusual: la congelación casi total del salto de agua, algo que no se había visto con esta intensidad en años recientes.
El SMN mantiene activas alertas naranjas y amarillas para la región cordillerana de Chubut, debido a la persistencia de temperaturas bajo cero y heladas intensas. Las previsiones indican que este escenario se mantendrá durante varios días más, con el ingreso de nuevas masas de aire polar.
Este tipo de fenómenos requieren una combinación de factores muy específicos: humedad relativa cercana al 100 %, temperaturas muy bajas mantenidas por varias horas y un caudal de agua moderado que facilite la congelación. Así lo explicaron especialistas consultados que destacan la rareza y belleza del evento.
El congelamiento de la cascada no solo genera imágenes espectaculares, sino que también impulsa la visita de turistas y aficionados a la naturaleza. Las fotografías del antes y después del congelamiento circularon ampliamente, promoviendo el turismo invernal en la región. Sin embargo, la comunidad local también debe prepararse para el impacto del frío extremo, que afecta tanto a las actividades cotidianas como a la infraestructura.
Además de Chubut, otras provincias patagónicas como Neuquén, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego también enfrentan bajas temperaturas, aunque el SMN pronostica que el frío estará dentro de lo normal o ligeramente superior al promedio para esta época del año.
Para este martes, se espera que las temperaturas continúen siendo extremadamente bajas en la Patagonia, con cielos despejados y vientos moderados, sin pronóstico de lluvias ni nevadas significativas. Esto favorece la conservación del paisaje helado y mantiene vigente la alerta por frío y heladas intensas en buena parte de la zona cordillerana y precordillerana.
En la zona oeste de la Patagonia, las precipitaciones y nevadas se mantendrán en niveles normales o inferiores, lo que podría afectar la calidad de la nieve para el turismo invernal. Por otro lado, el este y sur de la región experimentarán condiciones similares, con lluvias moderadas y temperaturas frías pero estables.