Por Agroempresario.com
El costo del transporte de cargas en Argentina sigue en alza. Según el último Índice de Costos del Transporte (ICT) elaborado por FADEEAC, en junio de 2025 se registró un incremento del 2,56%, acelerándose respecto del 0,8% de mayo, y acumulando una suba del 14% en el primer semestre del año.
La variación interanual alcanza el 32,8%, una cifra que, aunque inferior al pico inflacionario de 2023 (248%), evidencia la presión sostenida que enfrentan las empresas del sector en un contexto de alta volatilidad económica.
El ICT, auditado por la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, releva mensualmente 11 rubros clave que inciden en el costo operativo del transporte de cargas en todo el país. En junio, los aumentos más significativos se concentraron en:
Otros ítems como Neumáticos, Lubricantes, Seguros, Patentes y Material Rodante no registraron variaciones respecto de mayo.
Desde el Departamento de Estudios Económicos y Costos de FADEEAC, explicaron que “el contexto económico sigue atravesado por los efectos de la devaluación de abril y por los mayores costos de financiamiento, lo que impacta directamente en los insumos esenciales del transporte”.
Los datos cobran especial relevancia para el sector agropecuario y agroindustrial, donde la logística representa un componente clave de la competitividad. Los aumentos sostenidos en combustibles y servicios agregan presión a los márgenes del productor, especialmente en regiones alejadas de los puertos.
Además, la evolución del ICT influye directamente en la negociación de tarifas de fletes, un tema sensible para transportistas y productores por igual.
Con una inflación aún elevada y sin señales claras de desaceleración en los costos logísticos, el sector se prepara para un segundo semestre desafiante. Se esperan nuevos ajustes salariales, eventuales subas en combustibles y presión sobre otros componentes como seguros y mantenimiento.
La evolución del tipo de cambio, las políticas de incentivo al transporte eficiente y las mejoras en infraestructura serán determinantes para contener el impacto y mantener la sostenibilidad del sistema logístico nacional.