Por Agroempresario.com
El Gobierno enfrenta un nuevo desafío ante los mercados financieros: debe renovar $7 billones en deuda, entre Letras del Tesoro y bonos vinculados al CER. La operación es clave para estirar vencimientos y disminuir la presión sobre el tipo de cambio, tras la reciente suba del dólar.
El Banco Central (BCRA) implementó medidas previas a la licitación para asegurar la participación de los bancos. Entre ellas, se destacan el incremento de los encajes y la posibilidad de integrar el requerimiento con bonos públicos con vencimiento mínimo de 60 días. De este modo, el organismo busca garantizar un rollover elevado y controlar la inyección de pesos que podría presionar al dólar.
Fuentes del mercado explicaron que los cambios en los encajes remunerados buscan "captar liquidez adicional" para que los bancos participen activamente en la licitación. La consultora Outlier señaló: “Este accionar asegura demanda de los bancos en la licitación y busca garantizar un rollover alto”.
En la misma línea, desde PPI afirmaron que la suba de encajes permitiría evitar que la liquidez que ingrese al sistema financiero genere presión alcista sobre el tipo de cambio. Se estima que la demanda adicional por títulos largos podría situarse entre $5 y $5,1 billones, de los cuales unos $900.000 millones provendrían de la modificación en la integración de encajes.
El Ministerio de Economía, a cargo de Luis Caputo, presentará un amplio menú de instrumentos:
Solo dos instrumentos cuentan con vencimiento inferior a 60 días, en línea con la estrategia de alargar plazos y reducir la presión sobre el mercado cambiario.
Además, la Secretaría de Finanzas activó un canje de bonos con el BCRA para reducir el vencimiento semanal de deuda que superaba los $13 billones. La autoridad monetaria entregó alrededor de $5 billones en Lecap que vencen este viernes a cambio de Boncap con vencimiento el 15 de diciembre de 2025. Esta maniobra permite que el Tesoro reduzca el monto efectivo a refinanciar y alivie la presión sobre los bancos y el mercado de deuda.
El escenario financiero se complica por la reciente volatilidad del dólar y la necesidad de sostener el sistema financiero. La renovación de la deuda es considerada un test clave para la confianza de los inversores y la estabilidad del mercado local.
El equipo económico, liderado por Luis Caputo, busca que la operación sea exitosa y que el Banco Central pueda controlar la liquidez sin afectar las tasas de interés. La combinación de encajes remunerados, posibilidad de integrar bonos y el canje con el BCRA forman parte de una estrategia integral para asegurar un rollover cercano al 100%.
Los analistas destacan que la participación de los bancos es determinante. Un rollover menor al 100% podría inyectar exceso de pesos, presionar las tasas a la baja y generar un aumento del dólar en el mercado minorista. En cambio, una licitación exitosa permitirá que el Tesoro prolongue vencimientos y mantenga bajo control la emisión monetaria.
Además, la operación envía señales al mercado sobre la capacidad del Gobierno para gestionar su deuda sin afectar la estabilidad cambiaria, un factor crucial para mantener la confianza de inversores y bancos en los próximos meses.