Por Agroempresario.com
Una nueva generación de empresarios argentinos menores de 45 años busca transformar la forma de hacer negocios en el país. Bajo el paraguas de la Unión Argentina de Jóvenes Empresarios (UNAJE), más de 500 líderes empresarios generan 32.000 empleos directos y una facturación consolidada que supera los US$ 4.000 millones anuales, con fuerte presencia en 15 provincias y un marcado carácter federal.
“Las viejas prácticas tenían que ver con un empresariado más cerrado, enfocado en intereses particulares y lógicas de corto plazo”, explica Miguel Ippolito, presidente de UNAJE y socio en Grupo Mitre. Desde su mirada, la renovación implica comprender que el rol empresario debe ser más abierto, diverso, conectado con la comunidad y comprometido con el desarrollo colectivo.
Durante la 8ª edición del Foro Iberoamericano de Jóvenes Empresarios, en La Rural, Ippolito subrayó que “no alcanza con defender lo propio: necesitamos impulsar el desarrollo colectivo”. Esta premisa es la que guía a los nuevos empresarios, que buscan impactar positivamente en lo económico, lo social y lo ambiental.
Los números reflejan el alcance de esta nueva camada empresarial. Con un 75% de sus socios fuera del AMBA, UNAJE demuestra que el desarrollo empresarial federal es posible. La organización tiene socios que exportan servicios del conocimiento desde ciudades del interior, otros que invierten en plantas de reciclaje, y proyectos vinculados a energías renovables.
“Estimamos que nuestras empresas superan los US$ 4.000 millones en facturación anual. Si sumamos el efecto de la cadena de valor, el impacto económico es aún mayor”, asegura Ippolito.
Más allá de la crítica a la presión tributaria, UNAJE plantea una agenda propositiva. “No creemos que la solución sea solo bajar impuestos. Necesitamos reglas claras, simplificación burocrática y acceso al financiamiento”, sostiene su presidente. Además, proponen políticas activas de formación en oficios y en economía del conocimiento, entendiendo que “sin talento no hay competitividad posible”.
La comparación regional evidencia el desafío: Argentina cuenta con apenas 14 empresas por cada mil habitantes, frente a 25 de Brasil y más de 30 en México o Chile. Para los jóvenes empresarios, la clave es estimular la creación de nuevas empresas que generen más empleo y mayor competitividad.
Respecto a la situación económica actual, Ippolito mantiene un optimismo cauteloso. Destaca que la agenda de reformas del Gobierno nacional busca ordenar la macroeconomía y dar previsibilidad al sector privado, lo que resulta positivo. Sin embargo, advierte que todavía no se ven mejoras en el día a día de las pymes: “Sigue siendo difícil acceder al crédito, importar insumos o planificar inversiones de largo plazo”.
Los empresarios jóvenes identifican una serie de obstáculos transversales:
Inflación persistente y volatilidad macroeconómica.
Falta de financiamiento accesible.
Infraestructura insuficiente en gran parte del territorio.
Presión impositiva elevada.
Dificultades para exportar y competir en mercados internacionales.
Aun así, aseguran que el desafío es integral y que el empresariado debe involucrarse activamente en la construcción de soluciones colectivas.
La mirada de UNAJE también se orienta hacia la región. Ippolito afirma que Latinoamérica es un mercado natural para las empresas argentinas, tanto por la cercanía cultural como por las oportunidades comerciales en sectores como la economía del conocimiento, agroindustria, alimentos con valor agregado, minería y energías renovables.
“Compartimos idioma, huso horario y necesidades. Si generamos confianza y estabilidad, las empresas argentinas pueden competir muy bien en la región”, subrayó.
El cambio conceptual que impulsa UNAJE apunta a redefinir el rol empresario en la Argentina:
Impacto social y ambiental positivo.
Generación de empleo de calidad.
Innovación y arraigo en el interior.
Compromiso con el desarrollo federal.
En palabras de Ippolito: “Queremos un país donde haya cada vez más y mejores empresas, porque estamos convencidos de que ese es el verdadero motor del desarrollo”.
Con más de 500 empresarios jóvenes liderando proyectos diversos y con fuerte presencia federal, UNAJE busca consolidar un modelo de empresa que no solo genere riqueza, sino que también aporte soluciones colectivas para el futuro del país.