En el inicio de su gestión como ministro del Interior, Diego Santilli señaló que el principal desafío del Gobierno es lograr la incorporación de hasta ocho millones de trabajadores más al empleo formal en Argentina. La declaración se produjo este domingo durante una entrevista en Radio Mitre, donde el funcionario destacó la importancia de formalizar el mercado laboral y adelantó los ejes de la agenda parlamentaria del Ejecutivo, según informó Infobae.
Según Santilli, de los 23 millones de personas en edad de trabajar, solo seis millones cuentan con empleo formal en el sector privado y casi tres millones en el sector público, dejando a catorce millones sin acceso a derechos básicos como salud, vacunación programada y jubilación. “No tienen acceso a la vacunación programada, no tienen acceso a la salud, no tienen acceso a la jubilación”, enfatizó, subrayando que el objetivo es incluir entre seis y ocho millones de trabajadores en la formalidad.
El ministro aseguró que la próxima reforma laboral no afectará los derechos de los trabajadores actuales y citó al presidente Javier Milei: “Él dijo que es hacia adelante. Hoy existen convenios colectivos que pueden ser mejorables y perfectibles”. Como ejemplo, mencionó el convenio de Vaca Muerta de 2016, que permitió duplicar la cantidad de empleados en el sector petrolero. Santilli indicó que se promoverán mecanismos para que los trabajadores informales accedan a la formalidad y convocó al diálogo con distintos actores para superar las barreras existentes, de acuerdo con el reporte de Infobae.

En materia legislativa, el funcionario confirmó que mantuvo una reunión de más de una hora con el presidente Milei, donde se abordaron los temas prioritarios: sesiones extraordinarias y ordinarias, presupuesto nacional, modernización laboral, reforma fiscal orientada a la reducción de impuestos y la elaboración de un nuevo Código Penal. Santilli destacó que estos puntos constituyen el núcleo de las tareas inmediatas del Ejecutivo, mientras que la agenda ordinaria se proyecta para el resto del año.
Santilli remarcó la importancia de la coordinación con gobernadores, senadores y diputados, especialmente tras la reciente recomposición de ambas cámaras. Consultado sobre el pase de siete diputados del PRO, explicó que el movimiento venía gestándose desde antes de las elecciones y subrayó que la alianza entre La Libertad Avanza y el PRO se consolidó en la provincia de Buenos Aires, la ciudad y la mayoría de los distritos.
Entre los logros del gobierno, el ministro destacó la eliminación de piquetes —de nueve mil a cero— y la reducción del déficit fiscal en siete puntos, lo que permitió avanzar en la baja de impuestos. “Todo eso es lo que se comprometió el presidente. El país debe profundizar este rumbo para sostener el crecimiento durante veinte o treinta años consecutivos”, afirmó Santilli.
Respecto a la relación con los gobernadores, el funcionario anticipó: “Los voy a escuchar, que es el rol que me toca”. Aclaró que el diálogo se dará “dentro del marco definido por el presidente”, centrado en equilibrio fiscal y eliminación del déficit. También mencionó que desde 1994 no se realiza una reforma de la Coparticipación, y que aunque el debate sigue vigente, el primer paso será avanzar con el presupuesto, la modernización laboral, un nuevo Código Penal con tolerancia cero al delito y la reforma fiscal.

Sobre las críticas del expresidente Mauricio Macri respecto a la designación de Manuel Adorni como jefe de Gabinete, Santilli señaló: “Lo que creo es que hay que seguir sumando y estoy convencido de eso. Son conversaciones entre un presidente de mandato cumplido y un presidente en ejercicio. Yo prefiero enfocarme en la tarea que me toca, que es sumar para lograr las reformas. Las reformas son clave para nuestro país”.
En este contexto, Santilli subrayó que la agenda del Gobierno apunta a la formalización del empleo, la modernización del marco laboral y fiscal, y la consolidación de un esquema de crecimiento sostenible. El ministro concluyó que la cooperación entre poderes, gobernadores y legisladores será fundamental para avanzar en la implementación de las reformas y garantizar que los derechos laborales actuales se mantengan mientras se amplía la formalidad en el mercado de trabajo.