Claves para un correcto manejo de efluentes en la producción lechera

l consultor ambiental Claudio Kvolek detalla los pasos para gestionar los efluentes en un establecimiento lechero, a fin de generar las condiciones sustentables para que éstos puedan ser reutilizados en condiciones seguras, tanto para el ambiente como para las personas.

Aspectos a tener en cuenta

1- Diseñar sistemas acordes que estén acoplados al componente humano en su funcionamiento y alineados con la idiosincrasia del productor lechero de cada región. “Los criterios de diseño y dimensionamiento dependerán principalmente del sistema productivo en cuestión. No puede haber una solución para un establecimiento lechero genérico, sino que esta variará de acuerdo al sistema de extracción de leche y a las viviendas de las vacas de esa explotación en particular”, explica Kvolek.

2- Cada establecimiento debe estar compuesto por una sala de ordeñe y por uno o más de los siguientes sistemas de vivienda: campo abierto (aquí no se gestiona el efluente), corral, open-lot, pista de alimentación, compost barn y freestall. En este sentido, la discriminación entre sistemas productivos es fundamental, ya que el origen del agua que constituirá una parte importante de nuestro efluente tiene génesis distintas. Por un lado, la lluvia que caiga sobre los sistemas a cielo abierto en corrales, pistas o inclusive patios de espera de ordeñe que no estén techados y, por el otro, el agua para limpieza de fosas o las viviendas bajo techo, proveniente de perforación y extracción de pozos freáticos.

3- Las formas de manejar los efluentes son diversas aunque implican el uso de herramientas comunes: separadores de sólidos (pasivos o activos), pozos estercoleros, bombas y piletas para estabilización.

“Es importante enfatizar que la utilización de los purines con fines agronómicos se presenta como una condición favorable y a veces indispensable para eliminar residuos y darle un uso sustentable, donde en lugar de gastar energía para tratar grandes volúmenes de efluentes, debemos pensar en utilizarlos”, precisa el consultor.

4- Es importante distinguir entre el reúso y el uso agronómico. Mientras que en el primero se pone foco en la sustentabilidad del recurso hídrico, en el segundo se tienen en cuenta las necesidades nutricionales del suelo y de los cultivos.

5- Otras estrategias de puesta en valor son las de compostaje a campo o túneles, la producción de enmiendas enriquecidas o la generación de biogás, dependiendo de la escala de la empresa.