Argentina firma su primer contrato de GNL a largo plazo y Alemania será el comprador inicial

Argentina concretó este 1° de diciembre un paso decisivo para su posicionamiento en el mercado global de gas natural licuado (GNL): el consorcio Southern Energy y la estatal alemana SEFE firmaron el primer contrato de comercialización a largo plazo por 2 millones de toneladas anuales durante ocho años, según informó la propia compañía. El acuerdo, que se ejecutará a partir de 2027 desde la primera unidad flotante del proyecto Argentina LNG, se convierte en el mayor compromiso de exportación de gas desde el país y un factor clave para avanzar en el financiamiento de la iniciativa.

El entendimiento fue rubricado en Buenos Aires por Rodolfo Freyre, chairman de Southern Energy, y Frédéric Barnaud, director comercial de SEFE. La operación representa alrededor del 30% de la capacidad total del proyecto Argentina LNG, que en su primera fase planea exportar cerca de 6 millones de toneladas anuales mediante dos buques licuefactores.

Southern Energy está integrado por PAE (30%), YPF (25%), Pampa Energía (20%), Harbour Energy (15%) y Golar LNG (10%). Según indicó el consorcio, el contrato firmado con SEFE se encuadra en el plan estratégico para transformar a Argentina en un proveedor estable de gas a nivel mundial a partir de los recursos de Vaca Muerta, una de las mayores formaciones no convencionales del planeta.

El primer buque en operar será el Hilli Episeyo, con una capacidad de 2,45 MTPA, desde donde se enviarán los cargamentos destinados a Alemania. Este barco aportará cerca del 80% del volumen comprometido en el contrato, mientras que la segunda unidad, el MKII, se sumará en una etapa posterior hasta completar la capacidad total prevista de 6 MTPA para la fase inicial.

Para SEFE, una compañía propiedad del gobierno alemán que cuenta con unos 2.000 empleados y suministra gas y energía a clientes industriales de Europa, el acuerdo abre una nueva fuente de provisión para su cartera. La empresa comercializa anualmente alrededor de 200 TWh y se ha convertido en una pieza central de la estrategia energética alemana para diversificar orígenes luego de la crisis provocada por el corte del suministro ruso tras la invasión a Ucrania.

Durante la firma, Freyre destacó el impacto del entendimiento en la proyección internacional del gas argentino. “El acuerdo constituirá la primera venta a gran escala de LNG desde Argentina y representa un hito para el desarrollo futuro de las reservas de gas natural de Vaca Muerta. Estamos orgullosos de dar este primer paso en el mercado mundial de GNL con un jugador de reconocimiento internacional como SEFE”, expresó el ejecutivo, según comunicó Southern Energy.

Barnaud, por su parte, subrayó la importancia del convenio para los planes energéticos europeos. “No solo contribuye a la diversificación geográfica de nuestra cartera, sino que también fortalece la seguridad energética de Europa. Nos complace acompañar a Argentina en su camino para convertirse en un exportador mundial de GNL", señaló el directivo de SEFE. Añadió además que el entendimiento permitirá mantener la colaboración histórica que la empresa tiene con el equipo del buque Hilli Episeyo, que actualmente opera en Camerún y será trasladado hacia Argentina.

Del anuncio también participaron ejecutivos de las empresas socias del consorcio, entre ellos Marcos Bulgheroni, Group CEO de PAE; Santiago Martínez Tanoira, vicepresidente ejecutivo de Gas y Energía de YPF; Horacio Turri, vicepresidente ejecutivo y director ejecutivo de Exploración y Producción de Pampa Energía; Martin Rueda, managing director de Harbour Energy en Argentina; y Federico Petersen, chief commercial officer de Golar LNG. Su presencia marcó un respaldo político y corporativo a la iniciativa, que es considerada un proyecto estratégico para el país.

La magnitud del programa Argentina LNG explica el interés del consorcio en asegurar contratos de largo plazo. El desarrollo completo prevé una inversión superior a USD 15.000 millones, con una vida útil estimada de 20 años y exportaciones que podrían generar alrededor de USD 20.000 millones durante todo el período. De esa cifra, aproximadamente USD 7.000 millones corresponderían al acuerdo firmado con SEFE.

Uno de los puntos centrales del contrato es la fórmula de precio. Tal como señalaron fuentes del consorcio, la tarifa no es fija: está vinculada al índice Henry Hub, referente para el gas norteamericano, y al Brent, el barril de petróleo de referencia del Mar del Norte. Esta estructura es habitual en los contratos internacionales de GNL y permite ajustar el valor según la evolución de los mercados energéticos globales.

El proyecto argentino se inscribe en un contexto internacional en el que la demanda de gas licuado mantiene un crecimiento sostenido, especialmente en Europa y Asia. La reconfiguración geopolítica de los últimos años impulsó a los países europeos a buscar proveedores estables y con potencial de expansión. En ese marco, Vaca Muerta se presenta como una oportunidad para insertar a Argentina en un mercado dominado por Estados Unidos, Qatar, Australia y, en los últimos años, también por África Occidental.

Para el país, el acuerdo con Alemania representa más que un contrato comercial: es una señal de confianza hacia un sector que combina recursos de escala mundial con la posibilidad de desarrollar infraestructura exportadora que no existía hasta ahora. El envío de GNL desde barcos licuefactores permite acelerar los tiempos respecto de plantas en tierra, pero también constituye una inversión que solo resulta viable con acuerdos de venta firmes y de largo plazo.

Con este convenio, Argentina da el primer paso hacia una política de exportación sostenida de gas, una meta que el sector energético local viene planteando desde hace años y que, hasta ahora, se había visto retrasada por la falta de infraestructura y por cambios regulatorios recurrentes. La apuesta del consorcio privado y la adhesión de una empresa estatal europea sugieren un punto de inflexión en ese camino.

Si el cronograma se cumple, los primeros cargamentos con destino a Alemania saldrán en 2027, cuando el Hilli Episeyo comience sus operaciones en aguas argentinas. Será el inicio de una nueva etapa en la historia energética del país, que buscará consolidarse como exportador regional en los próximos años y avanzar hacia una posición global competitiva en un mercado en transformación permanente, tal como suelen destacar análisis de medios internacionales especializados como Forbes.