José Luis Daza podría integrarse al gabinete de José Antonio Kast como ministro de Economía, Energía y Minería

El secretario de Política Económica de la Argentina, José Luis Daza, confirmó este martes que recibió ofertas para integrarse al gobierno del presidente electo de Chile, José Antonio Kast, en un posible cargo como ministro de Economía, Energía y Minería. La noticia surge tras la visita de Kast a Buenos Aires, donde mantuvo un encuentro con el presidente Javier Milei y su equipo, incluida la presencia de Daza, con el objetivo de fortalecer la cooperación bilateral entre ambos países.

En declaraciones al programa Las dos anclas, del streaming Carajo, Daza respondió de manera cauta sobre la propuesta: “Me ofrecieron algunos cargos”, aunque no confirmó explícitamente cuál sería su función. Sin embargo, fuentes cercanas al equipo de Kast señalan que la cartera de Economía, Energía y Minería es la principal opción contemplada para el economista argentino.

Daza, de 66 años, nació en la Argentina y posee doble nacionalidad argentina y chilena. Hijo de un diplomático, estudió en Estados Unidos, donde desarrolló gran parte de su carrera profesional en JP Morgan y Deutsche Bank, entre otras instituciones financieras. Su vínculo con el exministro de Finanzas Luis Caputo se remonta a más de 30 años, tiempo durante el cual consolidaron una relación de amistad y trabajo que, según Caputo, podría haber facilitado esta invitación del gobierno chileno.

“Con José Luis nos une, además del trabajo profesional, una amistad de muchísimos años… siempre supe que, dada su enorme capacidad y profesionalismo, le iban a proponer algo”, declaró Caputo a La Casa Streaming. En la misma entrevista, destacó que Daza es uno de los pocos funcionarios optimistas respecto al futuro económico de la Argentina, subrayando su perfil técnico y su experiencia internacional.

La visita de Kast a la Casa Rosada incluyó un encuentro de casi dos horas con el presidente Milei, durante el cual se abordaron temas de seguridad, política migratoria y cooperación económica. La Presidencia argentina calificó la reunión como “excelente” y destacó que la agenda bilateral estará orientada a fortalecer la colaboración en áreas estratégicas, como el combate al crimen organizado transnacional y la gestión de los flujos migratorios regionales, con especial atención a la migración proveniente de Venezuela.

En materia económica, ambos mandatarios coincidieron en la necesidad de impulsar disciplina fiscal y cooperación comercial, adoptando principios que prioricen la libertad, la vida y la propiedad privada, según el comunicado oficial de la Presidencia. Durante la campaña chilena, Kast había señalado que la Argentina podía servir como modelo de control del gasto público: “Aquí vamos a ser igual de drásticos con el gasto político”, afirmó el presidente electo.

El posible nombramiento de Daza se inscribe en un contexto de mayor cercanía ideológica y política entre Milei y Kast. Ambos líderes se conocen desde 2022, cuando participaron de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), y desde entonces han mantenido un vínculo público y estratégico. Kast incluso respaldó públicamente a Milei tras su elección, describiéndolo como “un león que está haciendo historia”, mientras que Milei confirmó que asistirá a la ceremonia de transmisión de mando en Chile el próximo 11 de marzo.

El equipo económico de Kast enfrenta desafíos significativos, especialmente en sectores de energía y minería, donde se prevén reformas y proyectos de inversión de largo plazo. La incorporación de Daza, con experiencia internacional y conocimientos en finanzas globales, podría aportar al diseño de políticas económicas y energéticas que busquen estabilizar la economía chilena y fomentar inversiones extranjeras.

El contexto internacional y regional también marca la relevancia del posible nombramiento. La relación entre Argentina y Chile ha experimentado una cercanía inédita en los últimos años, y la cooperación en seguridad fronteriza y comercio se perfila como un eje central del nuevo vínculo bilateral. La idea de establecer un “cordón humanitario” para gestionar la migración sur-sur refleja la intención de ambos países de coordinar políticas migratorias más efectivas y humanitarias, evitando crisis y tensiones en la región.

Daza, que vivió más de 40 años en Nueva York, ha desarrollado una carrera orientada a finanzas internacionales y planificación económica, lo que lo posiciona como un candidato estratégico para un cargo de alta responsabilidad en el gabinete de Kast. Su experiencia en bancos globales y en la gestión de políticas económicas en contextos complejos refuerza su perfil técnico y su capacidad para enfrentar los desafíos que plantea la economía chilena en los próximos años.

Por el momento, la decisión final dependerá del propio Daza y de su análisis sobre los compromisos profesionales y personales que implicaría trasladarse a Chile. Kast, en conferencia de prensa, sostuvo que “la decisión dependerá del propio funcionario argentino”, mientras Caputo reconoció que “seguramente ya se lo ofreció”, dejando en claro que la oferta formal ya fue planteada y que la definición podría anunciarse en las próximas semanas.

La noticia del ofrecimiento también despierta interés en el plano político argentino, ya que Daza es considerado una pieza clave del equipo económico de Milei y su eventual salida implicaría una reconfiguración dentro del Ministerio de Economía argentino. Sin embargo, Caputo destacó que la relación personal y profesional con Daza sigue intacta y que la posibilidad de que se incorpore al gabinete chileno no afecta el compromiso del economista con la Argentina: “Todos los argentinos de bien queremos que se quede, pero seguramente todos los chilenos quieren que vayas”, afirmó.

En definitiva, la posible incorporación de José Luis Daza al gabinete de José Antonio Kast refleja la combinación de vínculos políticos, experiencia profesional y oportunidades regionales que caracterizan la relación bilateral entre Argentina y Chile. A la espera de la confirmación oficial, su nombramiento sería un movimiento estratégico para el nuevo gobierno chileno y marcaría un punto de inflexión en la cooperación económica y política entre ambos países, según informó Infobae.