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El ministro de Economía, Luis Caputo, se reunió este martes con los principales referentes de la Unión Industrial Argentina (UIA) en el Palacio de Hacienda para coordinar acciones destinadas a mejorar la competitividad del sector industrial y discutir la reforma laboral enviada recientemente al Congreso. El encuentro, que se llevó a cabo a las 14 horas, buscó generar un canal de diálogo institucional frente a la desaceleración de la actividad industrial y la caída del empleo formal, cuestiones que preocupan al sector de cara a 2026.
Durante la reunión participaron, además de Caputo, el secretario de Comercio, Pablo Lavigne, y el presidente de la UIA, Martín Rappallini, junto con miembros del comité ejecutivo industrial. Según un comunicado del organismo empresarial, ambas partes acordaron “mantener una agenda de gestión para trabajar en conjunto sobre los problemas del sector”.
El foco principal del encuentro estuvo puesto en la modernización laboral y la reducción del llamado “costo argentino”, entendido como el conjunto de cargas impositivas y regulatorias que afectan la competitividad de las empresas locales frente a productos importados. Caputo destacó en su cuenta oficial de X que conversaron sobre “la reforma laboral, la importancia de la formalización y la inversión” y confirmó que la intención es repetir reuniones periódicas con la UIA.
La UIA expresó su preocupación por la dinámica industrial durante 2025, caracterizada por un comportamiento dispar entre sectores y una tendencia negativa en el empleo formal. Según datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la industria se contrajo 0,8% en octubre respecto a septiembre, mientras que la medición tendencia-ciclo mostró una baja de 0,3%. La comparación interanual reflejó un descenso de 2,9% respecto a octubre de 2024, aunque el acumulado enero-octubre registra un crecimiento de 3,1% en relación con el mismo período del año anterior.
En términos de empleo, la UIA destacó que el sector industrial perdió 4.303 puestos de trabajo en septiembre y 21.190 en los primeros nueve meses de 2025, lo que evidencia dificultades estructurales en la generación de empleo registrado.
Los representantes industriales valoraron los avances en estabilización macroeconómica y equilibrio fiscal, pero subrayaron la necesidad de medidas adicionales para facilitar el acceso al crédito y reducir la presión tributaria sobre la producción de bienes transables, un factor crítico para competir en igualdad de condiciones con productos importados.
La UIA calificó la modernización laboral como un paso clave para revertir más de una década de estancamiento en el trabajo registrado. El proyecto en discusión en el Congreso busca reducir la litigiosidad, otorgar mayor previsibilidad a las empresas y fomentar la creación de empleo formal, con impacto directo en puestos calificados y a lo largo de las cadenas de valor de la industria.
Rappallini sostuvo que “las medidas que se adopten en este proceso serán decisivas para el desarrollo del entramado productivo argentino”, reforzando la necesidad de un diálogo institucional profundo y sostenido con el gobierno nacional.
El encuentro también sirvió para analizar posibles políticas ante un escenario económico desafiante. La UIA detalló que los sectores industriales enfrentan dificultades productivas y la necesidad de políticas que favorezcan la inversión y la competitividad, especialmente frente al incremento de importaciones de bienes industriales.
El ministro Caputo y la UIA coincidieron en la creación de una agenda periódica de reuniones que permita monitorear la evolución del sector, discutir medidas de política económica y evaluar los resultados de la reforma laboral una vez aprobada. La comunicación oficial subrayó que este diálogo se enmarca en el objetivo de “hacer nuestra industria cada día más competitiva”.
El encuentro sigue a otras reuniones previas de Rappallini con funcionarios nacionales, incluyendo al secretario de Hacienda, Carlos Guberman, y precede a la definición de estrategias que impactarán directamente en la actividad productiva y el empleo formal en 2026.
A pesar de la desaceleración reciente, la UIA mantiene expectativas positivas condicionadas a la implementación de políticas que reduzcan la presión fiscal, faciliten el crédito y aseguren estabilidad macroeconómica. Los empresarios destacan que la recuperación industrial requiere tanto medidas estructurales como un entorno regulatorio previsible, donde la modernización laboral y la inversión sean ejes centrales.
En síntesis, la reunión entre Caputo y la UIA representa un esfuerzo por consolidar el diálogo público-privado y establecer estrategias concretas para enfrentar los desafíos del sector industrial argentino, en un contexto de lenta recuperación económica y ajuste del empleo formal, según informó Infobae.
