Catamarca avanzó en la regularización dominial con la entrega de 105 escrituras

El Gobierno de Catamarca entregó 105 escrituras a familias de distintos barrios de la ciudad Capital y de localidades del interior provincial, en una nueva acción vinculada a las políticas de regularización dominial que impulsa la administración provincial. El acto fue encabezado por el gobernador Raúl Jalil, acompañado por el director ejecutivo de ARCAT, Pedro Monferrán, y autoridades del área notarial del Estado.

Las escrituras fueron otorgadas a vecinos de los barrios 120 Viviendas Norte, Santa Marta y Calera del Sauce, en la Capital, así como a beneficiarios del interior que accedieron al título de propiedad a través de la Ley Pierri, provenientes de Valle Viejo, Paclín, Santa Rosa, Ancasti y El Alto. La diversidad de los beneficiarios reflejó el alcance territorial de la política pública, orientada a garantizar el derecho a la vivienda con respaldo legal en toda la provincia.

Durante el acto, en el que también participó la Escribana General de Gobierno, María Belén Saadi Brizuela, el gobernador Jalil destacó la importancia social y jurídica que tiene la escritura pública para las familias. “La escritura tiene un valor muy importante porque permite tener una propiedad sin conflictos y con plena seguridad jurídica”, expresó el mandatario, al remarcar el impacto que este tipo de acciones tiene en la estabilidad familiar y en el ordenamiento del territorio.

Jalil puso en valor además el trabajo articulado entre las distintas áreas del Estado, que permite avanzar en procesos administrativos complejos y brindar respuestas concretas a una demanda histórica de muchos vecinos. Desde el Ejecutivo provincial señalaron que la regularización dominial es una herramienta clave para fortalecer la inclusión social y garantizar derechos básicos.

Por su parte, Monferrán resaltó el alcance del sistema implementado por la provincia y los resultados obtenidos hasta el momento. “Ya llevamos alrededor de 1.600 escrituras entregadas, lo que representa un avance muy importante en el ordenamiento del tráfico inmobiliario provincial”, afirmó. En ese sentido, sostuvo que pensar la vivienda como política de Estado no solo brinda seguridad jurídica, sino que también “fortalece el tejido social y genera tranquilidad para las próximas generaciones”.

El titular de ARCAT explicó que el trabajo técnico y administrativo que se realiza permite llegar a distintas zonas de la provincia, incluyendo localidades del interior donde históricamente el acceso a la escritura fue más complejo. Según indicaron fuentes oficiales, el objetivo es continuar ampliando el alcance del programa para reducir la informalidad en la tenencia de la tierra y facilitar el acceso a otros derechos asociados, como el crédito y la posibilidad de realizar mejoras habitacionales.

La Escribana General de Gobierno, María Belén Saadi Brizuela, destacó el compromiso de los vecinos que participaron del proceso de regularización. “Esto es posible gracias a la paciencia y al trabajo de cada familia, que aportó la documentación necesaria para cumplir el sueño de tener el título de propiedad”, señaló. Además, subrayó que la escritura no debe entenderse como un trámite más: “No es un simple trámite: es la garantía de poder defender su vivienda y de dejar la situación regularizada para sus hijos”.

Durante el acto también se escucharon testimonios de beneficiarios que recibieron su escritura. Alan, vecino de El Alto y beneficiario de la Ley Pierri, expresó que la entrega del título marca un antes y un después para su familia. “Hoy podemos pensar en el futuro sin preocupaciones”, sostuvo. En tanto, María, vecina del barrio 120 Viviendas Norte, remarcó el valor emocional del momento: “Tener la escritura en la mano es una tranquilidad enorme, porque sabemos que la casa es nuestra y queda para nuestros hijos”.

Desde el Gobierno provincial indicaron que la regularización dominial forma parte de una política integral que busca brindar previsibilidad, seguridad jurídica y equidad, especialmente a familias que durante años habitaron sus viviendas sin contar con el respaldo legal correspondiente. En ese marco, la entrega de escrituras no solo tiene un impacto individual, sino que también contribuye al ordenamiento urbano y al desarrollo de las comunidades.

Las autoridades adelantaron que este tipo de actos continuará realizándose en distintos puntos de la provincia, con el objetivo de sostener el ritmo de entrega de títulos de propiedad y avanzar en la regularización de nuevos barrios y localidades del interior. Para el Ejecutivo, se trata de una política de largo plazo que apunta a garantizar derechos y mejorar la calidad de vida de los catamarqueños.