Amenudo, la compra de carne a menudo se hace una vez al mes. Por ello, para garantizar que se mantenga fresca, hay muchos factores de seguridad alimentaria a tener en cuenta. Si la guardás de manera segura en el freezer antes de cocinarla, podés mantener tu cocina bien abastecida durante días, semanas e incluso meses.
La Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) tiene plazos específicos recomendados para almacenar los diferentes tipos de carne, desde aves crudas y filetes hasta tocino y carne en conserva.
La FDA tiene una tabla de almacenamiento con límites de tiempo para refrigerar alimentos y que no se estropeen ni sean peligrosos. Sin embargo, señalan que debido a que la congelación (a 0 grados Fahrenheit, -18 grados Celsius) “mantiene los alimentos seguros indefinidamente”, las recomendaciones se basan en preservar la calidad de la carne.
Panceta y salchicha
La panceta puede durar siete días en el refrigerador y un mes en el congelador. Se recomienda que la salchicha cruda, ya sea hecha de cerdo, res, pollo o pavo, se mantenga uno o dos días en el refrigerador y hasta uno o dos meses en el congelador.
Carne fresca de hamburguesa, otra carne molida y carne picada
Cuanta más carne se corta, más exposición hay a posibles bacterias. Para hamburguesas, carne guisada y otros tipos de carne picada, mantener de uno a dos días en el refrigerador y de tres a cuatro meses en el congelador. El pavo molido, la ternera, el cerdo y el cordero también se pueden mantener uno o dos días en el refrigerador y de tres a cuatro meses en el congelador.
Carne fresca de ternera, cordero y cerdo
La FDA divide los cortes más grandes de carne fresca en filetes, chuletas, asados ??y carnes variadas (lengua, riñones, hígado, corazón y chinchulines). Los filetes pueden durar de tres a cinco días en el refrigerador y de seis a 12 meses en el congelador; el asado ??también pueden durar de tres a cinco días en el refrigerador y de cuatro a 12 meses en el congelador. En cuanto a las chuletas, la FDA dice de tres a cinco días en el refrigerador y de cuatro a seis meses en el congelador, mientras que las carnes variadas se pueden almacenar durante uno o dos días en el refrigerador y de tres a cuatro meses en el congelador.
Sobras de carne cocida
Según la FDA, la carne cocida puede mantenerse de tres a cuatro días en el refrigerador y de dos a tres meses en el congelador. En cuanto a la salsa y los caldos, solo uno o dos días en la heladera y dos o tres meses en el congelador.
Pollo y pavo
Los pollos o pavos enteros pueden durar de uno a dos días en el refrigerador y hasta un año en el congelador, por lo que siempre es bueno tenerlos a mano. Si tenés partes de pollo cortadas, como pechugas o muslos, también pueden durar uno o dos días en el refrigerador y nueve meses en el congelador.
Pollo cocido
Si preparaste pollo frito, tené la seguridad de que puede durar de tres a cuatro días en el refrigerador y hasta cuatro meses en el congelador, en caso de que quieras guardarlo para más tarde. Los platos de pollo cocidos también pueden durar de tres a cuatro días en el refrigerador y se mantendrán de cuatro a seis meses en el freezer.
Fiambres
Una vez abiertos, los paquetes de fiambres tienen una vida útil más corta. Un paquete abierto puede durar una semana en el refrigerador y uno o dos meses en el congelador. El salame cortado puede durar de tres a cinco días en el refrigerador y uno o dos meses en el congelador. Los fiambres sin abrir pueden durar dos semanas en el refrigerador y uno o dos meses en el congelador.
Jamón
Para el jamón completamente cocido, el período de almacenamiento depende del tamaño. Un jamón entero puede refrigerarse hasta por siete días y congelarse durante uno o dos meses, mientras que la mitad de un jamón puede refrigerarse durante tres a cinco días y congelarse durante uno o dos meses. La FDA dice que el jamón rebanado dura de tres a cuatro días en el refrigerador y uno o dos meses en el congelador.
