Biofertilizantes: qué son y cómo se aplican, con la explicación de un especialista

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ay una tendencia por parte de los grandes jugadores de adquirir fertilizantes biológicos", asegura. Agro Advance Technology (AgroAT) es una empresa dedicada a la Investigación y desarrollo de tecnología aplicada. Juan Pablo Brichta, presidente y director en I+D, cuenta los desarrollos en biofertilizantes y su importancia para una agricultura de innovación y sustentable.

¿Qué son los biofertilizantes y cómo funcionan en los cultivos?

Es un término que abarca a todo lo que respecta a los fertilizantes biológicos y ahí podríamos incorporar no sólo a lo que el mundo entiende como biofertilizante, comercialmente hablando, sino también a los promotores de crecimiento vegetal, que son otra categoría. En este rubro de biofertilizantes, desde Agro Advance Technology venimos trabajando hace más de 14 años tratando de crear innovación en fertilizantes biológicos.

Desde un inicio, combinamos dos microorganismos en una misma formulación, Azospirillumbrasilense como un fijador libre de nitrógeno y Pseudomonas fluorescens como un solubilizador de fósforo, lo que permite que sus mejores cualidades “se ayuden mutuamente” que no es algo muy sencillo de lograr.

Un fertilizante biológico, según lo definió Kloepper en 1978, PGPR (plant growth promoting rhizobacteria) o rizobacteria promotora del crecimiento vegetal es un organismo altamente eficiente que estimula el crecimiento de las plantas y logra mayor tolerancia ante enfermedades.

¿Cómo es su aplicación?

En biofertilizantes hay dos líneas: una que es el tratamiento, donde inoculamos la semilla con Pseudomonas fluorescens y con Azospirillum brasilense que actúa como fijador libre y puede hacer aportes extras de nitrógeno. Tanto uno como el otro puede liberar fitohormonas, que son sustancias que promueven el crecimiento de los cultivos. Esto permite que, para graficarlo, cuando vos tenés una autopista (que vendrían a representar en un cultivo a las raíces principales) los vehículos van más rápido. En las raíces pasa lo mismo, tenes un floema o silema más grande, una infraestructura más grande.

En lo que sucede a raíces secundarias, las sustancias que se mueven van más lento o tardan más. Una línea de aplicación foliar, Phoebus Flo, que son microorganismos endófitos que actúan dentro de la planta y esto genera un shock metabólico muy interesante que generan un rendimiento del orden del 20%.

Los fertilizantes biólogicos ayudan a mejorar la eficiencia y el uso de agronómico de los recursos. Este tipo de productos son complementos de la fertilización química, esto significa que no se puede sustituir, sino que mejoran. Hay una frase que nos gusta usar que dice que cuando nos paramos sobre el suelo, estamos parados sobre el techo de otro mundo. Esto quiere decir que no deberíamos pensar sólo en fertilizantes biológicos, sino también en biofungicidas y otros productos que el agro requiere y que están en el suelo.

¿Cómo está posicionado este mercado en Argentina y el mundo?

El mundo en este momento está en la cima de un cambio paradigmático. Hay un incremento a nivel global del mercado del 16 y 20% en biológicos y, en lo que respecta a agroquímicos, está en el orden del 3%. Estamos en un momento super interesante en esta industria, hay una tendencia por parte de los grandes jugadores de adquirir fertilizantes biológicos porque son conscientes de que el mundo está demandando mayor cantidad de alimentos, más inocuos y de mayor calidad porque hay un mercado que está exigiendo eso.

Hay una estrategia en Europa, denominada “De la granja a la mesa”, donde aspiran a bajar al 50% el uso de fertilizantes y el 30% de agroquímicos. Estamos en una situación ambiciosa por parte de la Unión Europea y con un potencial enorme para la industria de los insumos. En un escenario futuro es muy promisorio lo que se viene. Las tecnologías y los análisis del suelo pueden tener costos elevados, pero pueden contribuir a hacer la tercera pata de la mesa: la pata química, la pata física y la que no hemos analizado es la biológica. Los egipcios cuando sembraban trigo, eran grandes observadores y veían que había lotes de ese trigo que producían que rendían más que otros. Entonces se les ocurrió inocular ese suelo y lo llevaban a otros que producían menos. Lo que no sabían era que había microbiomas o microorganismos que favorecían el mayor desarrollo del sistema productivo. Eso es algo que se conoce hace cientos de años y hoy la tecnología, el cómo y el por qué nos permite llevarlo a otra escala y contar con productos sorprendentes.

Estamos trabajando en líneas de investigación que no existen en el mercado local o en latinoamérica y que realmente son una innovación que estaremos en condiciones de presentar en el 2021. Nuestros productos quedaron dentro del top 10 mundial en el concurso de agropages.com. Mumtech y Hulkgreen quedaron dentro del top 5 de los Bio-Pesticidas mientras Phoebus y Phoebus Flo ocupan el noveno y décimo puesto dentro de los Bioestimulantes. Con esto quiero decir que fuimos la única empresa latinoamericana en participar compitiendo con distintos jugadores del mundo.

¿Cómo está conformada Agro Advance Technology?

Nos encontramos en el Polo Tecnológico del Parque Industrial de Pilar, provincia de Buenos Aires, que es un entorno ideal para fomentar la biotecnología. La empresa tiene una infraestructura de 1800 m2 y está integrada por un grupo multidisciplinario de técnicos químicos, ingenieros agrónomos y tenemos convenios con entidades académicas que colaboran en lo que es desarrollo.

Trabajamos en pos de tener como política de crecimiento, cada 2 años lanzar productos nuevos al mercado y esa política la venimos llevando adelante. En plena pandemia incrementamos nuestra capacidad productiva al doble.

Este esfuerzo local nos ha permitido desarrollar ciertos vínculos y relaciones con jugadores sumamente importantes del área. Pero lo más importante, y esto no lo digo por ser parte de la industria, sino que es importante para el sistema productivo es tener en cuenta el manejo más amigable con el ambiente.

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